Capítulo #11

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¿Dónde estoy? Un lugar blanco y con un maldito pitido que me quiere reventar los oídos. ¿Esto es el hospital? Ay no, de seguro me voy a morir. Deja de ser tan dramática Sophia, me recuerda mi subconsciente.

- Despertaste -miro hacia la puerta y veo a Douglas, ¿qué él hace aquí?

- Hola... -logro decir en un murmuro.- ¿Qué hago aquí? -le pregunto moviéndome para sentarme.

- ¡Oh no, no te muevas! -casi grita mientras se acerca a mí.- Debes de estar acostada, tu pierna esta vendada y debes dejarla quieta -dice y miro mi pierna y recuerdo lo que pasó, quiero saber si mi bebé está bien, si Max está aquí.

- ¿Y Max? -le pregunto con la esperanza de que él esté aquí, que al encontrarme haya cambiado de parecer o lo que sea.- ¿Dónde él está?

- Max está en la sala de espera -yo sonrío-, él fue quien te encontró pero en ese momento te desmayaste -dice tomando mi mano.- Me preocupé mucho cuando Claire me llamó, todos están preocupados -y su cara lo demuestra claramente.- Iré a decirles que despertaste -yo asiento y él se va.

Nunca lo había visto de esa manera, se ve tan sincero. Douglas es el padre de mi bebé. ¿Cómo está mi bebé? Le pregunté por Max y ni siquiera le pregunté por mi bebé, ¿que clase de madre soy?Debo de esperar a ver a mi madre para preguntarle, no quiero que le haya pasado algo.

- Hija, que bueno que despertaste -entran mis ambos padres con una sonrisa, como aliviados porque haya despertado.

- Mamá, ¿cómo esta mi bebé? -le pregunto sin dejarlo pasar otra vez.

- Está bien gracias a Dios. El doctor dijo que fue una suerte haberlo salvado, ya que perdiste mucha sangre. Mi nieto o nieta es ¡fuerte! -mi madre grita lo último alegre y yo río por tal cosa.

- Que bueno, ¿y todo está bien? , ¿el doctor no dijo nada más?

- No, no dijo nada más -esta vez habla mi padre, quien ahora se acerca y me besa la frente.

- Oh que bien -digo y miro mi pierna vendada.- Quiero descansar, tengo sueño.

- Oh no, debes de comer algo antes de que te vayas a dormir -dice mi madre moviendo sus manos en el aire.- ¿Qué quieres que te traiga?

- Pizza -digo sin pensarlo dos veces.

- No señorita, usted no puede comer eso todavía -dice el doctor entrando por la puerta, que de hecho es muy joven y lindo.

- La que esta mal es la pierna, no mi barriga, ni mi boca y ni siquiera estoy enferma -digo negando y me cruzo de brazos.- Yo quiero pizza, una pizza mediana con beacon.

- Deja de actuar como una niña, el doctor dijo que no puedes comer eso, no ahora -dice mi madre negando con su cabeza mientras me fulmina con la mirada.

- Puedes comer unas sopas, claro, unas sopas no vienen mal en tu estado -dice el doctor.- Si no te llena, puedes acompañarlo con una gelatina -sonríe amablemente.

- ¡Iughh! A mi no me gustan las sopas. ¡Yo quiero pizza! -grito lo último

- Señora puedes ir a Subway y comprarle un sándwich de 6 pulgadas, es eso o sopas -dice el doctor dirigiéndose a mi mamá, idiota, ¿no ve que estoy embarazada y que tengo antojos?

Un Error *EDITANDO*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora