¿Amor a primera vista? - Abraham Mateo

Cap 38: La fiesta de 15

Un mes después...

-Hija, la tia Dalia acaba de llamarme diciendo que te invita a los 15 años de Pamela
-Fiesta? Alguien mencionó una fiesta? -apareció Marco por la puerta
-Si, pero la fiesta es para mi -me apunté con ambos pulgares -No para alguien que en un par de días cumple 18
-Pero no crees que alguien que acaba de cumplir 17 está algo grande como para ir a ese tipo de fiestas?
-Pos no.-respondí infantilmente
-No se peleen -interrumpió mi madre -También invitó a ti y a Spencer
-Y puedo llevarlo a el? -pregunté con ojitos de cachorro a mi madre
-Se lo pregunté y dijo que si
-A quién? -preguntó Marco algo confundido

Mi madre y yo le dirigimos la misma mirada de reproche a Marco, el se encogió de hombros e hizo un puchero.

-A el... -agité mis manos expresándome
-A... -hizo el símbolo de AM con los brazos
-Si a el

El timbre de la puerta sonó y Spencer abrió la puerta.

-Chiquilla! Es para ti! -gritó desde la puerta
-Voy -corrí a la puerta

Spencer se alejó y vi a Abraham con un enorme ramo de rosas, estaba vestido con unos pantalones negros, una camisa blanca y un corbatín decoraba perfectamente su cuello.

-Vine a ver a mi princesa -sonrió

También sonreí y lo invité a pasar, me dio un corto beso en los labios y me entregó ese gran ramo de rosas que traía consigo.

-Son para tu -sonrió aún más

Marco

-Es mi idea o veo a Abraham más romántico de lo normal? -pregunté a Spencer mientras los observaba desde la cocina
-No te lo contó mamá, verdad?
-Contarme que?
-Hay hermano -me dio una palmada en el hombro -Estás mas desactualizado que la abuela con Dvicio
-Vamos, dimelo -supliqué
-Está bien, pero no digas que yo te lo conté
-Bien, ahora dimelo
-Pinky promesa? -sacó el dedo meñique
-Spencer, eso es de chicas -lo reproché
-Dije pinky promesa
-Esta bien, pinky promesa
-Y ahi va... -empezó -En medio de la gira, descubrió que el tenía a otra chica...
-Este cabrón se las va a ver conmigo -me precipité
-Espera Marco -me detuvo Spencer -Por eso es que mamá no te cuenta nada...
-Ya, y... -suspiré profundo
-Y pues se lo echó todo en cara a el y huyó de el, se encontró con un chico lindo y le invitó a un café, platicaron un poco y luego el la encontró, hubo una escena de llantos y, después de todo, lo solucionaron y aquí están -señaló a la pareja que estaba en el sofá

Mabel

-Abe...
-Si princesa?
-Quieres ir a una fiesta de 15? -bajé la mirada -Es de mi prima
-Encantado de la vida -rió -Cuando es?
-Es este sábado -tomé delicadamente su corbatín -Quiero que uses este mismo corbatín el sábado, te hace lucir más guapo que de costumbre

El sábado por la tarde...

-Chiquilla! Tu príncipe llegó! -gritó Marco
-Bajo en un momento -respondí -Que tal así, mami?
-Estás estupenda cariño

Tomé mi móvil, bajé y me encontré con tres chicos muy apuestos, con el mismo peinado y un corbatín en el cuello, parecían trillizos, excepto por la estatura, mis hermanos eran más altos en comparación a Abe.

-No se muevan de donde están -les hice una foto -Listo

Abe se acercó a mi y le mostré la foto, el sonrió al verse junto a mis hermanos que, coincidentemente, estaban vestidos iguales.

-Ni haciendo un acuerdo hubieramos qeudado tan iguales -rió
-Pareja, es hora de irnos -nos llamó Spencer desde la puerta

Subimos al coche nuevo de Spencer, un Audi negro, que mi padre le había obsequiado por su cumpleaños y por haberse graduado de la secundaria con un puntaje casi perfecto.