Cuatro paredes. Un cuarto. Una cama. Un librero. Muchos libros. Un estéreo. Música.
Encerrada. Yo vivía encerrada. El mundo exterior me llamaba a gritos. Yo fingía no escuchar nada. Todo lo que había fuera de mis cuatro paredes me parecía interesante y muy atrayente. Salía a intentarlo todo. Las escapadas de una noche. El sexo. El alcohol. Las drogas. Los clubes. Todo eso que los chicos de mi edad hacen diariamente. Yo también quería intentarlo todo. Pero tan pronto ponía un pie fuera me sentía débil y vulnerable. Volvían todos los recuerdos de las burlas y llegaban las lágrimas descontroladas y el deseo de abrirme la piel. Yo lo intentaba. Pero era prisionera de mis pensamientos, que me mantenían encerrada.
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Una estrella rota
PoesíaPorque todos nos sentimos perdidos en algun momento de nuestra vida. Porque al final, todos somos estrellas rotas y perdidas.