Ten Words

Relato #2

Palabras: Familia - Noche - Camino - Perdidos - Asesino - Policía - Tres - Traidor - Clan

El auto se agito y el niño se despertó de su profundo sueño. Miro hacia la ventana del auto y vio las estrellas brillar en la oscura noche. Miro hacia su madre, quien le sonreía y decía unas palabras que el niño no entendía. Este se alargó entre los brazos de la mujer que lo agarraba y vio a sus tres hermanos durmiendo. La mujer alargo el brazo, coloco el chupete en la boca del niño. Este, pronto sintió sus parpados caer.

Lo que lo despertó esta vez, fueron los brazos fríos de una persona desconocida junto a los gritos desesperados de su madre. Abrió fuertemente los ojos y contemplo a su familia. No era como la recordaba en la fotografía que se encontraba en su casa. Donde todos estaban felices. Ahora, dos de sus hermanitos estaban tendidos en el frio suelo de aquel camino perdido entre la oscuridad. Un líquido extraño se extendía desde sus cuerpos hasta la calle. El niño no entendía porque sus hermanos estaban durmiendo en el suelo, pero su padre estaba abrazando a su hermano mayor y su madre estaba arrodillada en el piso llorando. Esto provoco las lágrimas del niño.

Un grito desgarro la noche. Gritos y llantos ahora provenientes de aquel pequeño chico. El asesino removió incomodo el cuerpito y siguió caminando.

El padre del niño grito que era un traidor, que como era posible que su propio hermano sea capaz de tal atrocidad. Que culpa de aquel grupo de personas con las que solía juntarse. Esas personas que no le gustaban. Esas personas que solían llamarse El Clan del Cuervo. Y otra cantidad de gritos que se perdieron. El niño no entendió ninguna de estas palabras, pero no le gustaba ver a su padre de esa forma. Lucho con sus manitos, empujando el cuerpo de aquel hombre. El asesino, solo levanto el brazo en el que no llevaba al bebe y limpio su cuchillo en su manga.

Pronto se oyó un ruido. Era la policía. El hombre lanzo una palabrota y comenzó a correr.

El niño jamás volvió a ver sus padres.

El niño jamás volvió a ver la claridad del día.