Queriendo Amarte [Jung Hoseok]©

2. Viernes

─...Y desde entonces me prohibió acercarme a su casa.─Concluí mi relato. ─No entiendo la actitud de esa malcriada, podría jurar que le gustó aquel beso.

─Tu lo has dicho Hobie, es una malcriada, ¿Que esperabas? Ella nunca ha sido una persona fácil de tratar.─Namjoon se cruzó de brazos y acomodó su cuerpo en el amplio mueble de mi sala.

─Aun no creo que la hayas besado, yo pensé que era lesbiana. ─Esto ultimo, dicho por Jungkook no me causo ninguna gracia. Lancé un cojín directo a su rostro, y otro más a Namjoon quien se carcajeo en el acto.

─Ella no es nada de eso, nadie conoce tanto a Sofía como yo. Desde que eramos niños me he sentido a gusto estando con esa chica, aunque se muestre amargada es la persona más sensible y tierna que pueda haber. Sus gestos son únicos y las caras que hace al enojarse, más que incomodar, son un deleite para mi. Adoro compartir momentos con ella y escuchar sobre sus intereses a pesar de que no se parezcan en nada a los míos.─Mis amigos me miraron algo asqueados pero no me importó.─Al principio pensé que estaba loco, después, que solo era admiración, no se como no pude darme cuenta antes de que estaba enamorado.

─Esa es una palabra muy grande Hobie, ¿Estás seguro de lo que sientes?─Namjoon parecía no creer lo que escuchaba, el es uno de mis mejores amigos, me atrevería a decir que es mi confidente, él más que nadie sabe que no soy ningún santo y que tiendo a lastimar a cualquier chica que se me relacione. Lo cierto es que ya estaba cansado de aquello, en realidad quería intentar algo de verdad significativo, pero no quería hacerlo con nadie más que ella.

─Nunca he estado tan seguro de algo en mi vida como lo estoy ahora. ─Le sonreí esperando que pudiera notar algo de sinceridad en mi. No obtuve ninguna respuesta de su parte.

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Viernes por la noche, noche de celebración, celebración del cumpleaños de 'mono'.

Se que dije que por nada del mundo iría a la maldita fiesta, pero no hay nadie que pueda con la insistencia de Hyesun, hizo hasta lo imposible para lograr su objetivo, llego al extremo de confabularse con mi madre para que pudiese acompañarla. Ahora me encontraba encerrada en el baño mirando el vestido ostentoso que debía colocarme.

─Odio esto, te odio a ti... ─Me referí al largo vestido rojo que sostenía.─Odio a Abigail por ser tan insistente. ¡AFFF! Odio a 'Mono' por invitarme a su jodida fiesta. ¿Acaso no sabe que no me agrada? ─Continuaba profiriendo mis desgracias, hablando sola como una demente.

─Cariño ¿Te encuentras bien?─Golpearon a mi puerta interrumpiendo mi monólogo.

─Ah... S-si, si mamá. ─Como pude, me coloqué la incomoda prenda. Lleve mis manos hacia atrás, tratando de alcanzar la cremallera del vestido pero mis intentos eran en vano.

─¿No quieres que te ayude con eso?─Me miró con esa compasión con la que solía mirarme cuando me encontraba en apuros. Subió la cremallera de mi vestido sin problema alguno y me tomo de las manos para girarme sobre mi eje.─Sabia que necesitabas ayuda. Estas hermosa mi niña.

─Mamá, no vallas a llorar. ─Rodé mis ojos, los suyos ya estaban humedecidos y dispuestos a soltar alguna que otra lágrima.

─Esta bien.─Se limpió sutilmente con sus dedos.─Venía a avisarte que Abby y Anthony ya están aquí.

─Wow. ¿Quien eres tu y qué le hiciste a mi amiga? ─Bromeo Abby al verme.─Estas hermosa Sofi, ¿Lista para irnos?

─No. Aun no estoy segura de acompañarte Abigail. Es que... mi calzado es incómodo, puedo torcerme un tobillo con facilidad con esas cosas... y... el vestido es... muy largo, hay muchas probabilidades de que me enrede con él al camina, y mis...