La luna escuchaba el dolor y sufrimiento de Dominik, y sin poder hacer algo al respecto la luna también sufría, el cielo lloraba y a la luna le daba vergüenza que la vieran llorar, por eso se escondía entre las nubes opacas y espesas.
Dominik ya ni siquiera recordaba su destino, su meta final, sus propósitos ni sus sueños, cansado de estar tan vacío y seco pidió a la luna que lo ayudara, que el quería cambiar, que no podía seguir fingiendo, no quería parecer antipático a cualquier situación sabiendo que todo le afectaba, gritó y lloró, todas las personas lo miraban en su escena dramática de descubrimiento y libertad,todos veían a "El hombre" llorar, creían que no tenía sentimientos, creían que no tenía corazón tal cual como lo dijo.
Pero Dominik estaba en un momento de desesperación, implorando perdón le decía a la luna que el la amaba, que su mayor dolor era no poder estar a su lado, ser una estrella y brillar juntos en el universo. El dijo que era una locura, quien podría enamorarse de la luna? Pensaban todos, pero a el no le importaba, el dijo que su amor era verdadero, que nadie sabía su nombre mas que ella, nadie conocía su lado sensible, nadie sabía lo que había vivido, nunca nadie lo supo, mas que la luna, únicamente la luna. Tomo una pistola y la colocó en su cabeza, pero antes de disparar lo último que miró fue el cielo y las estrellas, miró a la luna y le dijo -Te amo- y disparó.
Ellos eran distintos, la luna era un satélite natural y Dominik un simple humano con terribles experiencias, pero el amor que sentía Dominik por la luna y la luna por Dominik hicieron que las cosas cambiaran, Dominik no brilló al lado de la luna, pero el se postró de bajo de ella cada noche para que la luna pudiese reflejarse en Dominik que ya no era "El hombre" ahora era "El mar".
Cada noche la luna y el mar se visitan, el mar mira a la luna, y la luna logra ver su reflejo en los ojos del mar, ambos estaban felices, sus tormentas habían terminado, ahora estaban juntos, cuando la luna se ponía brillante para el mar el mar crecía de alegría por disfrutar la luna como ninguno otro podía, hacían el amor en las noches de luna llena, se volvían uno mismo y se entregaban amor.
Esta es la historia de como un hombre logró amar tanto, que el universo le dio la oportunidad de estar al lado de su amada.
