miradas

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No era mi hermana era Daniel, no me intereso y silencie el teléfono apague la tele luego de que acabará la serie que estaba viendo, me dirijo a mi cuarto a ponerme una camisa blanca ya que es muy cómoda para dormir y es ligera de quitar en las mañanas.

Suena el timbre de mi casa.

-¿quien puede ser a esta hora?.
Revise por la ventana del segundo piso y era Daniel.
Desafortunadamente me alcanzó a ver y me pidió que le abriera la puerta.
Yo acepte únicamente porque estaba tarde y era muy peligroso estar fuera a esa hora.
"Le podría pasar algo malo y no quería quedar con el cargo de conciencia"

Él paso y se acomodo en uno de mis muebles y me invitó a sentarme junto a él.

Yo sentía pena, estaba casi desnuda frente a él.

Daniel- se que estas molesta
Debí haberte contado lo de mi novia
No quería que te enteraras así
Pero todo paso muy rápido
Y siempre que podía hablar contigo
Perdía la noción del tiempo y pensaba en todo menos en ella.

Daniel no paraba de hablar y de dar explicaciones, yo sólo lo miraba con un poco de rencor y no respondía nada sólo oía.

Daniel- anyel no me mires asi, me haces desearte y por si no te fijas tienes poca ropa.
No sabes todo lo que pasa por mi mente.
Y más cuando juegas con la lengua pasándola por tus labios.
-tu cabello suelto combina muy bien con tu camisa.

Yo no pude evitar y Sonreí de paso también me sonroje y agache la mirada.

Él tomó con sus manos mi cara y me empezó a besar, trate de evitarlo y me levante para ir a la cocina.
No sabía que hacer, no podía mandarlo a la calle.
Él llegó a la cocina y empezamos a discutir.

Anyel- porque no la respetas?
Porque le haces esto?
Acaso quieres convertirme en tu pasatiempos.

Daniel- no digas eso anyel, es lo que menos quiero.
-yo te dije que tu me gustabas y mucho aún no cambio de parecer.
-estoy con ella pero no porque la ame, es sólo que no la puedo dejar ahora porque esta enferma y no quiero causarle daño.

Anyel- así...y que enfermedad tiene para que no la puedas dejar?

Pregunte en tono un poco burlón.
Daniel agachó su rostro y en voz baja me dijo.

Daniel- no hablemos más de ella, por favor, prometo que te contare pero no ahora.