la batalla final

cap 5

Duramos bastante tiempo sentados en el césped hablando de cosas aleatorias hasta que llegaron los ocho Ángeles que me rodearon, caminaban con gran elegancia pero estaba cubiertos de sudor y tierra, en cierto grado se veían graciosos

-ya se van a ir las Quimeras- dice el de ojos violeta- quizá deberías volver con ellos

Por una parte quería ir con mis amigos y con mi gente pero por otra no quería irme, descubrí cosas interesantes de los Ángeles, pude conocer a Uriel y su vida, no quería irme pero sabía que tendría que hacerlo

-oigan pensamos que...-estaba diciendo un muchacho Ángel que venía subiendo la colina hasta que me vio- ¿Qué haces acá?

Se estaba dirigiendo a mí, su cara me parecía conocida

-no te había podido dar las gracias cuando me salvaste- me dice acercándose, instintivamente me pare de un salto, Uriel hizo lo mismo y se coloco frente a mi protegiéndome, su gesto me pareció muy dulce pero yo se me defender por mi misma

-no te preocupes- le dije poniéndole una mano en el hombro, lo conozco

-si- responde

-es mas a todos los conozco- dije mirando a los Ángeles que estaban detrás de él

-todos te estamos agradecidos por habernos salvado la vida- dijo alguno en el fondo

-no es nada- dije restándole importancia- siempre lo hago

-ya se están yendo los barcos- dice uno

No me quería ir pero cada momento llegaban mas Ángeles, a todos los había salvado de la muerte y todos al verme susurraban entre ellos, algunos me sonreían otros me miraban sorprendidos pero agradecidos, eso nunca me había sucedido en la vida, ni siquiera cuando llegaba de una batalla, simplemente me felicitaban

-si quieres te puedes quedar con nosotros- me dice uno muy atractivo, es alto, ojos azul oscuro, cabello negro. Su propuesta me dejo muda, no podía creer que me estuviera diciendo que me podía quedar con ellos

-¿en serio dejarían que me quedara con ustedes?-pregunte confundida

-si ¿Por qué no? Tu nos salvaste la vida- dice uno- aparte nadie viene acá

-está bien- dije sonriendo- me quedare, pero hay un problema

-¿Cuál?- pregunta Uriel

-si las Quimeras piensan que estoy muerta no se van a ir hasta encontrar mi cuerpo- dije- soy importante para el general, tienen que hacer que me secuestran o algo así, pero no hagan que se van a quedar acá

-muy bien- dice el de ojos violeta, si me voy a quedar acá me tengo que aprender los nombres de todos- ¿Qué sugieres?

Dude unos segundos, analice la situación, tenían un buen numero de Ángeles y eso estaba a nuestro favor, por fin idee un plan

-me van a secuestrar- les dije- dos de ustedes me van a coger del los brazos y van a volar sobre los barcos, todos van a venir detrás de nosotros, van a decir que me van a llevar al rey o a quien sea y se van, yo voy a forcejear pero no me van a dejar escapar. Yo voy a gritar y eso, alguno de ustedes me va a golpear para que me calle

-ninguno te va a golpear- dice otro Ángel

-es puro teatro, no es necesario que sea un golpe fuerte- le dije

Fue una eternidad hasta que los barcos se fueron, cuando ya estaban lo suficiente lejos hable

-ya es hora- les dije- ¿Quién me va a llevar?