Hija de un delicuente

Capitulo 5

Maratón 2/2


-No. Solo que me molesta venir a esta escuela –gire y me encontré con Justin frente a mí.

-Ya te acostumbraras—dijo sonriendo

-No creo

-Veras que si – Me guiño un ojo

-Por qué usas gorilas—Apunte hacia donde se encontraban sus guardaespaldas.

-Mi padre me obliga – rio

-Que fastidio- Hice una mueca rara en la cual Justin sonrió.

-Ni que lo digas – rio—quieres que te lleve – pregunto

-No gracias puedo caminar – dije mirando hacia otro lado

-No me molesta llevarte – se encogió de hombros

-Lo observe por unos segundos- está bien vamos
 

Justin abrió la puerta de copiloto y me subí en su automóvil último modelo, sus guardaespaldas venían detrás de nosotros en una camioneta, y otra frente a nosotros, valla si que será difícil esta misión.

Después de un tiempo, llegamos a donde era mi hogar. Le agradecí a Justin por a verme traído y baje del auto para acto seguido entrar a la casa sin mirar cuando Justin se fue.

-¿Por qué no mencionaste que tenía novia?—Dije entrando a la oficina de Tomas o más bien "mi padre"

-No te enseñe a tocar—dijo parándose de la silla

-De hecho no me enseñaste nada bueno – Cruce mis brazos para mirarlo fijamente

-Jamás cambias-rio- Ahora que es lo que te molesta-volvió a tomar su asiento-.

-No mencionaste que Justin tenia novia, esto se me hará más difícil, no sé cómo le hare para enamorarlo, lo único que yo sé es seducir, pero no hago que se enamoren de mí.

--rio fuerte—no seas ingenua, creí mencionar que le pedirás ayuda a tu nueva amiga Miley, ella hará que lo logres

-Para enamorarlo tengo que ser demasiado cursi y olvídalo no lo are—conteste furiosa
-Tendrás que hacerlo si no, no lo lograras
- Solo que me vestiré como yo quiera entendiste
-Así no lo logras
-Yo soy la que hago el trabajo sucio así que hare lo que yo quiera--- salí cerrando la puerta fuertemente.

Hoy era otro día más de tortura, y había decidido que este día no vestiría como una niña Barbie, si no que vestiría como me gusta y me siento más cómoda. Decidí tomar un pantalón algo flojo, colocando un cinturón negro para apretar el área de la cintura, elegí un top blanco junto con unos converse y mis lentes oscuros, recogí mi cabello en una coleta y Salí de mi habitación para acto seguido irme a la escuela o mejor dicho la cárcel.

Entre al salón y todas las miradas se posaron en mí, pues ayer vestí como una niña tonta y hoy visto algo más ruda.

-Sheyla ¿Qué te paso?- no pudo evitar reír mientras me observaba de pies a cabeza.

-Acaso te importa de cómo me vista—eso me había molestado

-No es eso solo que te miras un poco rara—dijo seria

-Lo siento es solo que odio que les importa de cómo me vista—dije tratando de arreglar lo anterior

-No me importa a mí—sonrió—aun así seré tu amiga—dijo mientras me abrazaba

-Gracias—esto es raro, me dije a mi misma-
-Que ridícula te miras—dijo Selena mientras llegaba junto a Justin tomados de la mano
-Selena déjala, si así le gusta no tienes por qué juzgarla-me defendió Justin, ESPEREN! ¿Me defendió?
-Estas de su lado—Selena se hizo la ofendida
-No es eso solo que odio que te comportes así –dijo serio
-Pero mírala es una ridícula—dijo riendo sínicamente

Ok, esto me molesto y para el mal humor que tengo, la única reacción que hice fue golpearla.