¿Es lo que yo pienso?

20 3 0
                                    

Capítulo 21

Llamada*

-Hola Abby, ¿dónde estás y con quién?- dice Luke a través de la línea

-Hola cariño, estoy en mi casa a punto de salir con Sophie, ¿y tú?- respondí

-Vale- dice serio y cuelga la llamada

Deje el teléfono encima de la mesa y fui a hacerme una coleta.

Cuando volví al salón después de 3 minutos tenía 7 mensajes de Luke:

-¿A dónde vas a salir?
-¿Abby?
-¿Por qué no me contestas?
-Contéstame
-¿Puedo ir con vosotras?
-Abby ¿te pasa algo?
-Estoy de camino a tu casa espérame.

¿Qué le pasaba? Estaba muy raro, no paraba de preguntarme todo, ¿será que no confía en mí? No lo sé...

Sonó el timbre y Sophie fue a abrir mientras yo trataba de coger algo de comida.

-Hola Abby-dijo y me dio un abrazo seco y parado

-Luke, ¿te pasa algo conmigo? Estás muy raro... ¿por qué me preguntas tanto?- conteste

-No cariño es solo que me importas muchísimo- dijo y me cogio la mano.

-Vale cariii, ahora me voy al cine con Sophie, ¿nos importaría dejarnos solas? Necesitamos hablar de algunas cosas, te quiero cari.- dije mientras cogia mi bolso y salía por la puerta.

Nos fuimos caminando al cine que no estaba muy lejos, fuimos al cine de aquí.

-Tía, Luke esta muy raro...¿qué crees que le pasa?- pregunté curiosa y extrañada

-No lo sé, pero ahora mismo no estoy demasiado bien para hablar de chicos, lo siento...- contestó cabizbaja

-Vale, es verdad, lo siento-Conteste

Pasemos la tarde súper divertida, vimos 3 películas, una de risa, de amor y otra de miedo. Pero también nos paseemos por el centro de la ciudad y por algunas tiendas.

Pero un momento...¿qué estaba viendo?

¿Era Luke abrazado con una chica?

No logre verle la cara a la chica pero si pude verles abrazados y estaba claro que no era nadie de su familia...

No me salían las palabras, lo único que me salían lágrimas y sollozos.

¿Pero sabéis que era lo peor?

El hecho de que el me controlara y me vigilara y luego el este con abrazándose tan cariñoso con otra tía.

¿Dónde están esas palabras que me decía al oído: Te quiero, te amo, eres la única en mi vida, nadie más que tú.

¿Dónde están?

Lo único que no podía evitar era llorar y llorar...

Sorprendentemente IrresistibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora