Capítulo: 5

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LUHAN

Cuando todos fueron puestos detrás del muro fueron salvados, por ello recuerden: Nunca salir del muro, nunca desobedecer a la OMS porque solo queremos lo mejor para la humanidad

MANUAL INSTRUCTIVO DE LA OMS



Recordar aquella escena de mi vida me dolía:

DIEZ AÑOS ANTES

—Creo que a papá le gustará tu regalo—Aún recuerdo el rostro de mamá con su espesa cabellera larga, su rostro delicado y facciones casi perfectas, Donghae siempre había estado enamorado de ella; lo sabía porque siempre lo mencionaba en casa, su grácil figura y su amor infinito hacia mí me mantuvo a salvo por un corto lapso en mi infancia, aquella tarde habíamos estado acampando en un pueblo no muy lejos de Busan, ella preparaba la merienda hasta que de pronto los infectados nos atacaron por la espalda, primero fue uno y luego diez.

Intentamos salir del lugar pero el automóvil nunca funcionó, el tiempo estaba en contra nuestra, pronto los infectados rodearon el automóvil y ella me escondió en el asiento trasero, acomodó sobre mí todas las mantas y cajas posibles para mantenerme oculto.

—Escucha mi amor, ¿Recuerdas cuando papi nos enseñó a jugar con estas? — Levantó la pistola de papá e inmediatamente asentí—Bien, ese es mi niño—Era la primera vez que veía a mamá llorar—Si alguien quiere entrar al auto tienes disparar

—¿Si? —Puso una nueva manta sobre mí—Incluso si es mami. Te amo mucho.

Por un instante creí que ella también vendría conmigo así que le hice un espacio pequeño, creí que ella siempre estaría conmigo, pero en vez de eso; me entregó la pistola pequeña que siempre llevaba en su cartera, me sonrió y dijo que todo iba a estar bien, luego salió del automóvil, escuché algunos disparos y luego nada, prácticamente se entregó a ellos, minutos y quizá horas después por fin los horribles gruñidos se detuvieron, tuve que salir del auto porque Donghae estaba gritando nuestros nombres, supuse que mamá ya estaría con él y que los tres iríamos a casa.

— ¡Papá! —Abrí el auto sin tener conciencia de que aun habían infectados alrededor, si solo cualquiera de los demás infectados me hubiera atacado todo hubiese estado mejor, pero no fue así, era ella, era mi madre y estaba irreconocible, intenté hablarle hasta que la vi corriendo hacia mí.

— ¡Luhan! —A lo lejos oí la voz de mi padre. 

— ¡Mamá! —Sus manos me alcanzaron, su bonito rostro ahora tenía un aspecto tenebroso, su ropa estaba hecha tirones y ya no había una sonrisa en sus labios sino algo parecido a espuma espesa y putrefacta, jalé la puerta y me aseguré de poner el seguro pero ella se estrelló contra mí, el impacto fue tan fuerte que por una fracción de segundo escuché como el vidrió se fragmentaba de a poco.

Entonces lo hizo otra vez, recé porque papá llegara pronto y escuché disparos a lo lejos pero nadie llegó, mamá golpeó el vidrio de nuevo y ahora pude ver como las líneas fragmentadas iban creciendo más y más. Lloré, le grité que se detuviera pero su cabeza volvió a chocar contra el ya muy débil vidrio que se rompió en decenas de pedazos, entonces tomé el arma e hice lo mismo que papá me había enseñado, tiré del gatillo sin mirar hasta que ya no había nada.

Ella dejó de moverse, inerte y sin vida frente a mí, yo la había matado, rápidamente mi padre llego con otros hombres, su mirada paso de mi hacia mi madre, nuevamente de mi hacia mi madre.

Ese mismo día algo se ensombreció en su mirada, desde que aquel día él no me considera más su hijo, desde aquel día que no me mira con los ojos de antes. Ahora pareciese que me odia y no lo culpo, si tan sólo no hubiera insistido en salir de paseo aquel día. 

DEADLY OBSESSION [HunHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora