4."comunicación"

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Miro la pantalla de su teléfono y justo ahí estaba abierto el whatsapp.

¿Cómo debería empezar? Pensaba el pelinegro. Nervioso. Los únicos contactos que tenía era el de su padre y hermano. Aun así no se podía creer que enserio tenía su número. Todo comenzó en la mañana.

—mierda, llego tarde! —bramo, mientras llevaba una tostada en la boca, el pelinegro corría para llegar a la estación y abordar el tren que lo llevaría a su preparatoria. —y todo por ese maldito sueño—murmuro a regañadientes.

Minutos después y en ese mismo instante al cruzar la calle—¡hey sai!

Al oír su nombre se detuvo y dirigió su mirada al lugar de donde provenía aquella voz. Con sorpresa miro al rubio quien lo llamaba, el cual estaba montado en un deportivo color rojo. ¿Me llamara a mí?

—¡si tú!—dijo el rubio—¡ven rápido!

Sai sin rechistar se acercó, algo extrañado por la reciente situación...nunca se había acercado a hablarle y prácticamente eran desconocidos.

—sube. —el oji azul le mostraba una gran sonrisa. —te llevare.

—pero—lo interrumpió.

—anda, después de todo vamos a la misma dirección.

Sin decir nada el pelinegro se subió al auto, pues sabía que llegaría muy tarde si no aceptaba la oferta.

—Veo que vas tarde— comento el rubio divertido por la situación, mientras aceleraba—sujétate.

Sai solo asintió incómodo, sin saber que decir.

—no hablas mucho no. Te pareces a cierto amigo mío.

¿Amigo suyo? Se cuestionó internamente el pelinegro. El rubio era muy ágil manejando, mientras miraba como evadía la innumerable cantidad de vehículos al frente se dio cuenta de algo y lo miro.

—tu... tu eres amigo de yamanaka-san, ¿cierto? —

—mmm ¿Por qué lo preguntas?, ah, no me digas. ¿te gusta ino?—lo miro momentáneamente con picardía.

Sai negó. ¿Qué le digo? ¿Piensa sai? Se dijo internamente.

—no, solo necesito su número, para entregarle un trabajo.

—pero no están en el mismo salón. ¿Por qué no se lo entregas cuando llegues ahí?

—veraz, la señorita yamanaka y yo no hablamos mucho y por coincidencia se le olvido su cuaderno en el salón y como me toco los deberes decidí llevármelo y tú, te imaginaras que ella es popular en cuanto a mí.

—entiendo. —comprensivo—mi teléfono está en el bolsillo izquierdo de mi bolso, sácalo. Y no te preocupes no tiene contraseña.

—¿Dónde está?

—atrás.

sai se voltio y vio el maletín, asimismo decidió agarrarlo y comenzó a buscar el teléfono. Al encontrarlo lo tomo y comenzó a buscar el número.

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¿Qué hago? Me siento tonto al hacer esto, enserio ¿Por qué lo hago? Es verdad para que no me sigan molestando. Una y otra vez se preguntaba ¿cómo había terminado en esa situación? Meditaba al respecto. Se encontraba realmente nervioso.

¡Ya se!.—exclamo, pues al parecer se le había ocurrido una gran idea.

Muy bien, comencemos con esto.

Por otra parte la rubia se encontraba charlando con sakura y hinata, cuando justo en ese instante su teléfono suena.

—Ummm—

—¿pasa algo ino? —pregunto la pelirosa bebiendo de su cola.

—al parecer tengo un mensaje.

—oh, será de aquel que se burla de ti, por escribir pésimo jaja—burlona y con una mirada picara comento la ojijade. —y dime al final le contestaste jaja

—cállate—contesto molesta, mientras desbloqueaba su teléfono y accedía a la aplicación. —y no, no lo hice.

—yo no creo que ino escriba mal. —añadió la ojiperla. — es más, me niego a creer que enserio ese chico sepa algo de ortografía. Ya que yo misma le corregí a ino.

—pero no sabes si es un chico, puede que sea una chica. —dijo sakura.

Nuevo mensaje de número desconocido

Hola...no sé porque te tengo agendada y ni siquiera te conozco, pero pienso que eres realmente preciosa.

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Ino al leer el mensaje le pareció un tanto extraño. Sakura al notar la mirada de sorpresa en su amiga. —¿y ahora que paso? —Decía acercándose para ver—¿es el chico ortografía?

—ah—ino negó con la cabeza al escucharla—es simplemente un mensaje de un número desconocido.

—eh? —

Tanto hinata como sakura arquearon una ceja al escucharla—¿y qué dice?

Ino les mostro, ambas se acercaron para leerlo y sakura sonrió. —vaya ino, siempre tan popular, ya posees un admirador. ¿Y que no piensas contestarle?

—ya pensaba hacerlo. —aseveró.

Ino

¿Quién eres?

Los ojos de sai se ampliaron al leer el mensaje, ¿ahora que le digo? No puedo decirle mi nombre... ummm. Poso su mano sobre su mentón, pensativo.

Me llamo Nai

Ino

No conozco a ningún nai.

Porque tardas tanto en responder

No te conozco, ni siquiera tienes foto de perfil. Voy a bloquearte.

Nai-(SAI)

¡espera!

No soy un acosador.


Cada vez, más cerca de ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora