El sabor de tu boca (Yaoi)

El chico debajo del farol

-Hasta mañana- abrí la puerta de vidrio sin ver atrás, desde hace 2 años que trabajo en un café y no puedo decir que me va mal, mientras no vaya a la escuela todo de maravilla.

- Si, nos vemos llegas temprano-

Ryiel un señor calvo y ya de mayor edad y es nada mas que mi jefe, trabajo a las afueras del pueblo Akiiza con 3,000 habitantes y más forestación que casas ni hablar del clima que cae de maravilla, mi jornada no es tan pesada entro a las 6 y salgo a las 11 aun así me da tiempo de leer y cenar. Tengo una vida social realmente lamentable, siempre he creído que es innecesario. Esa noche hacìa mas frió de lo normal pues se acercaba el invierno y eso significaba mas clientela. :D

-Achuu!!-

Oí a alguien destornudar debajo del farol que iluminaba el parque, me quite un audífono a lo mejor podría ser un vándalo o un drogadicto pero no pude evitar acercarme al chico recostado debajo del farol, puede que haya visto su rostro antes o haberle servido el café, amablemente me acerque a el y me incline a ofrecerle un pañuelo.

-Aquí tienes- le extendí mi mano, con sus manos heladas lo tomo y me sonrió, se sentía muy bien ser una buena persona ya que nunca he tenido la mentalidad de si das debes recibir o al revés, no crecí con eso. Probablemente si el chico fuera familiar de algún pueblerino lo habria reconocido, digo, en un pueblo tan pequeño donde todos conocen a todos es imposible no convivir.

-Gracias, eres muy amable ¿Como te llamas? no muchos pasan por aquí - sus facciones son muy finas y su cabello corto y blanco, seguro es extranjero, tenía unas gafas muy delgadas y un arete en la oreja izquierda, sin embargo era extraño ver muchos extranjeros por aquí pero siempre eran bien recibidos.

-Oh, no seas tan educado mi nombre es Dylan-

-Ahh, oye Dylan me lastime el tobillo y me preguntaba si acaso tienes algo para esto - no puedo invitar a extraños a mi casa y menos ahora que hay rumores por el pueblo de gente asesinando y esas cosas. Tampoco es que tenga miedo claro que se defenderme solo, aparte dudo que esta persona sea un asesino en serie, caerse y no saber que hacer solo es cosa de tontos.

-No hay nadie en casa si quieres te puedo llevar , te puedo curar y eso-

-¡Si! esta perfecto llévame a tu casa- no creo que haya ningún inconveniente, si me descubren diré que es hijo de mi jefe y no habrá problema

Obviamente lo lleve cargando a modo princesa, el muy inútil no podía dar ni un paso caminamos en silencio, sudaba aunque hiciera mucho frió , probablemente el calor de mi cuerpo era mucho lo bueno es que no pesaba nada y su cuerpo frió traspasaba su ropa un poco mojada por el sudor debió haber estado mucho tiempo afuera.

-¿Esperabas a alguien o te dejaron solo? , si no hubiera llegado hubieras muerto de hipotermia ahí y seria uno de los muchos cuerpos encontrados-

-Si, esperaba a mi carnada o algo así ¿Como que cuerpos encontrados?-

-Así que estoy llevando a un violador a mi casa, ¡no puedo esperar mas por ser violado! y sobre los cuerpos la verdad no podría decirte mucho- no me haría tanta gracia saber lo que sucedería si pasaba algo pero a lo mejor habla con metáforas, era extraño que no se enterara del aquel rumor

-¡¿QUE?! espera yo n..no me refería a eso-

-Calmate ya llegamos, eres bienvenido - rodeó sus brazos en mi cuello para que pudiera abrir la puerta. -Listo recuéstate, iré por vendas y pomada no dolerá nada lo juro- era un experto en curar pequeñas heridas, mi hermanita Kena era muy delicada, yo era el salva-heridas cuando se caía o tropezaba.

Entre a mi baño saque lo necesario del cajón y cuando volví ya no estaba mierda, claro lo sabía era un puto ratero. Aventé las cosas al suelo y empece a buscarlo por toda la casa, no estaba, pero aun mas importante ¿Que se llevo? Volví abajo y guarde las cosas de nuevo , me mire al espejo y detrás mio estaba el, había pequeñas manchas rojas en su lente y ropa.

-Perdóname por lo que voy a hacer,probablemente tengas que limpiar despues-

-¿Quieres entrar al baño? no te preocupes ahora mismo me salgo-

- No, yo... ammm quise decir... se supone que en este momento deberías hacer una cara de horror y yo te atacaría y... así sería mas fácil ¿Entiendes?-

-Osea que si me piensas violar, sabes que... olvídalo ten límpiate sería muy malo que alguien te vea con la camisa así,dámela yo te la lavo-

-Yo... ¡No hagas las cosas tan difíciles! Por favor- se acercaba lento y con la cabeza agachada hasta que entró completamente al baño y cerró la puerta, esto no era lo planeado dos personas en un baño .... me senté en la taza y con la mente en blanco lo mire a los ojos, tan grandes como dos piedras rojas y brillantes.

- Se a que quieres llegar, pero mira que solo trato de ser amable-

- No quiero que seas amable o no podre comerte-

-Déjate de tonterías y qui..- el chico se abalanzo sobre mi ahora mas pesado que antes, no me dejaba levantarme-

-A mi me gusta mi virginidad sabes, pero me gustaría mejor perderla con una linda chica, no con un violador así que ... si me harías el favor de quitarte hombre que te estas pasando - hago lo que puedo pero el no se mueve e inmóvil como un piedra siento su mano deslizarse por mi espalda rompe mi camisa y...

- Agh! Duele... Detente por favor- mis palabras se volvieron mas débiles conforme a el chupaba.

-Lo siento-

Los dos colmillos que perforaban mi cuello me hacían volar en una ráfaga de dolor y excitación, sentía como la sangre iba dejando mi cuerpo, no podía hacer nada. No se detendría fue por esto por lo que vino y ¿Fue esto lo que se llevo? la verdad solo hay un problema seguiré siendo virgen.

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Desperté hecho una mierda, con mi cuerpo pesado y los ojos ardiendo, en condiciones verdaderamente graves, esperaba a que una linda enfermera llegase con el desayuno ya llevaba días aquí y los doctores no entendian a que se debía mi anemia yo nunca había padecido de esto, pero desde que Lynn viene a visitarme no he podido salir de aquí, la verdad nunca veo cuando se va solo lo oigo decir gracias y hasta después, claro es que no volvía de seguro por la falta de tiempo o que en realidad ya se harto de venir cada 2 días .
Me levante de la cama y me fui a bañar el agua caliente relajaba mis músculos, me senté en el piso de la bañera a pensar, el porque siempre me venia el recuerdo de una mordida, por mi mente paso la imagen del día que llegue al hospital Lynn no dejaba de pedirme perdón y sollozar mientras me apretaba de la mano, los doctores le preguntaban que era lo que había pasado y por lo que escuche mientras me lavaba la cara el vidrio del espejo se rompió cortándome el cuello, era notable la venda que traía puesta, pero por miedo a ver la cicatriz que me dejaría, decidí dejarla cubierta.

-Gracias por el desayuno- volví a la cama y empece a comer, no me sabia a nada el jugo de naranja

-Hoy vino su madre a visitarlo , pero le ha ocurrido un percance y se ha tenido que ir- dijo la enfermera mientras prendía la tele y acomodaba el suero

-Ahh si no hay problema-

* Buenos días. Nos encontramos hoy en el pueblo Akiiza donde se han encontrado 2 cuerpos a la orilla del rió Kazanawa, se desconoce la causa, pero familia tenga cuidado pues el asesino sigue prófugo aunque se hace lo que puede para capturarlo, su paradero es desconocido*

La enfermera acabó de ver la noticia y se despidió, aproveche para apagar la tele y volver a acostarme, tenia que ir a trabajar pero mis condiciones todavía no son las adecuadas, la tarde se paso muy lenta y en silencio, para matar el tiempo leí un libro que me regalo Lynn me había contado ser un muy fan de los grandes escritores, hojie el libro y me llamo la atencion una imagen de un árbol, pero no era un árbol común y corriente, si no que transmitía algo que no sabría explicar sin antes leerlo. Comencé el libro con las ganas de llegar hasta esa página pero me fue inútil pues caí dormido con el libro en mis piernas.

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Hola otra vez, bueno esta es otra historia que estoy subiendo ahora yo sola. Gracias a todos!!! Espero que les guste :3