Será verdad que los poetas tienen un poco de artistas y un poco de locos; al menos yo, pierdo la compostura en ciertos momentos. Pues a ratos divago en mis multifacéticos sueños, y soy mas impredecible que el futuro cuando me dispongo a escribir versos.
No puedo evitar hacer poesía, no puedo negar que se ha convertido en mi mejor medicina; ya que me controla el dolor de cabeza mejor que la aspirina, me calma el calvario mejor que la morfina, y me fortalece mejor que cualquier vitamina.
Solo la poesía tiene el poder de hacerme olvidar a esta vida mezquina, que consume mis ilusiones y me olvida a merced de mis tentaciones en la mas oscura cantina; sitio donde desahogo mis frustraciones brindando con la melancolía; el lugar en el cual mis lagrimas se combinan con el agua ardiente, que antes de desvanecerse me acaricia rudamente; la posada más conveniente para un fugitivo inconsciente, para un adicto a la suerte, para un ser que no le teme a la muerte.
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El Llanto Del Bolígrafo
PoetryCuando la boca calla, el corazón habla. Cuando la lágrima cae, el viento la recoge. Cuando el alma se derrama, el espíritu lo anima. Cuando el bolígrafo sus penas escribe, el papel sus lágrimas recibe.