¿Quien te persigue?

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Cap 1 ¿Quien te persigue?

Había pasado un mes desde que volví. Miraba por la ventana, miraba y observaba el camino a casa otra vez.

Sabía que iba a ser un golpe para mí, pero para él no lo fue, cuando vi su rostro cansado sorprendido por llegar a mitad de la noche.

No llegué a decirle nada de lo que había pasado, mi padre sacó sus propias conclusiones, de las cuales habrían sido verdad si nunca me hubiera encontrado con Harry.

Se imaginaba que me había ido por un tiempo ya que me había tomado el año sabático, pero cuando la mujer que me alquilaba el piso le entregó mis cosas empezó a preocuparse y llamó, aunque eso ya lo sabía, esas llamadas eran la razón de que me encontrara aquí.

Conocía a mi padre y sabía que no estaría preocupado, no solía avisar cuando me iba y estaba acostumbrado a que desapareciese, apenas me gustaba relacionarme con los demás, nos quedamos casi un par de horas hablando, hasta que me ofreció mi antigua habitación.

Y ahora estaba en el bus de regreso a casa, necesitaba alquilar un piso, eso me lo podía permitir, continuaba mirando el paisaje, como cuando estuve por última vez con Zayn dirigiéndome a una vida que odiaba, nunca me había dado cuenta lo agobiante que podía llegar a ser esto, la rutina siempre te llega a consumir.

Detestaba cuando el bus se detenía en cada parada y dejaba la puerta abierta demasiado tiempo, el viento frío entraba y me estremecía, miraba como la gente bajaba, siempre lo mismo, me distraje buscando el botón para parar y el frenazo brusco del bus hizo que me inclinara hacia atrás golpeando mi espalda contra el asiento.

Volví a mirar por la ventana casi empañada y fue cuando vi ese bar, por mi mente pasaron varias preguntas a la vez. -¿Estaría allí? ¿Tendría que bajar? ¿Sería capaz de volver? y Harry ¿dónde estaría?.

Todas esas preguntas daban vueltas en mi cabeza y las preguntaba todas en menos de un segundo y sin dudar más bajé rápidamente antes de que se cerrarán las puertas.

Realmente hacía frio, mis manos que estaban a una temperatura corriente empezaron a congelarse. Esta era la época del año más horrible, el invierno, siempre oscuro y nublado.

Me quedé mirando estúpidamente aquel bar, el viento soplaba con más fuerza, si no llevara el pelo recogido no podría ver nada, dudé entre entrar o quedarme esperando el otro bus pensando en lo patético que era esto.

Tenía algo de esperanza en encontrar a Zayn, cuando le pedí que no desapareciera, aunque el mismo no prometió nada solo lo intentaría, no podía juzgarle, la culpa era mía por tener aquella esperanza tan absurda.

Decidí esperar al siguiente bus, pero si me quedaba los diez minutos que tardaba acabaría congelada, a si que empecé a subir las pequeñas escaleras de madera con las manos en los bolsillos ya estaban rojas y apenas las sentía . Levante la mirada y miré a través de la puerta con vidriera las pocas personas que habían sentadas, unas con las miradas perdidas y las otras hablando entre ellas. Abrí la puerta y el calor que había era agradable y el olor a café invadía el lugar.

Esa camarera que recordaba me quedó mirando un rato detrás de la barra, no quite la vista de sus ojos hasta que me di la vuelta para quitarme la chaqueta y fue cuando vi a ese chico de pelo rizado afuera, estaba de espaldas con una chaqueta de cuero marrón y se alejaba mientras yo estaba paralizada mirándole con un nudo en el estomago, salí corriendo detrás de él pero se alejaba más, era inútil y tampoco sabía si podía haber sido él.

Después de lo que podía haber sido una jugada de mi subconsciente decidí no entrar otra vez en el bar y esperaría el bus afuera. Tenía tantas cosas en la cabeza, me senté en el banquillo mientras me ponía el abrigo, los diez minutos pasaron como segundos mientras pensaba. Al llegar a casa me cambie y decidí hacer mas llamadas de las ofertas de alquileres, no me sentía cómoda aquí.

-¿Cómo te ha ido?- dijo sin levantar la vista del periódico con la tele encendida.

-Por ahora no hay nada que me convenga, voy a buscar más números a ver cómo me va- Dije cogiendo un vaso de agua- Espero no estar mucho tiempo buscando.

-Vanessa, sé que es algo incomodo para ti, pero puedes quedarte el tiempo que haga falta - Bajo el periódico y vi sus ojos azules, no era propio de nosotros mostrar cariño, era algo extraño entre los dos.

-Gracias papá, aun así seguiré buscando lo que pueda- Me acerqué al sofá donde estaba sentado.

-No eres la misma, se que nunca hemos mostrado afecto y no es necesario porque sabes que, te quiero- Esto era incomodo tanto para mí como para él- Pero algo ha pasado en esos tres meses en los que estuviste fuera-

No me había detenido a pensar que habían pasado tres meses, aquellos meses en los que habían pasado tantas cosas, en los que había sufrido pero también había querido.

-No lo sé, puede que haya sido el viaje , he reflexionado sobre muchas cosas durante este tiempo-

-No creas que me creeré que te fuiste de viaje, si te dije que creía eso era para saber si me decías la verdad, no sé donde estuviste, ni que te ha pasado, no te llamaba solo porque te hubieran traído tus cosas aquí, si no porque me preocupabas. - Sus palabras me sorprendieron, no era nada ingenuo.

-Creo que aún no es tiempo para hablar de eso, haré unas llamadas y cenaremos -

Subí a mi cuarto aquella charla y creer ver a Harry después de tanto tiempo habían acabado conmigo, sentía que iba a llorar y eso es lo que quería todo el tiempo, no había tenido suficiente.

Continúe llamando hasta que me quedé dormida unos veinte minutos, me desperté y ya estaba oscureciendo, maldito invierno, volví a cerrar los ojos con la intención de volver a dormir y ahí estaba con su sonrisa y su pelo castaño.

-Harry- Dije susurrando

-Duerme- Sentí como sus brazos que me rodeaban, cerraba con fuerza los ojos por miedo a despertar, sus manos acariciaban mi espalda. Esto parecía más real que este último mes tan borroso.

Sus rizos me hacían cosquillas, quería verle, intenté abrir mis ojos pero era inútil, no podía, el abrazo de Harry se hacía más pesado, cada vez me dolía mas y me asfixiaba, no podía respirar estaba desesperada por tomar aire su abrazo se convirtió en un vacío oscuro. Me desperté agitada, aterrorizada.

Lleve mis manos a mi cabeza, me plantee seriamente que me estaba volviendo loca ¿qué quería decir esto? si es que tenía una explicación lógica. Ya no veía al chico de pelo rizado con una picara sonrisa mostrando sus hoyuelos, estaba todo oscuro.

Los golpes a mi puerta de mi padre avisando para cenar me despejó por completo, fui al baño a lavarme la cara, me senté un momento al borde de la bañera, pasando mis manos por mi cara, respire hondo y baje a por mi padre, supongo que era la única persona que tenía, en la que podía confiar.

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Sombras del pasado - 2nd Parte de "perdida en el horizonte" (Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora