Camila's PoV
Le di una ultima mirada antes de subir al auto de mis padres.
El camino a casa jamás había sido tan decepcionante siempre tenía una sonrisa en el rostro. Ya que podia estar con mi familia por completa.
"Kaki", mi hermanita menor tomó mi mano derecha entre sus manos. Buscando atención.
"Si, Sofi?" Dije volteando mi mirada de la ventana.
"Sucede algo?" preguntó buscando mis ojos en ese momento. Negué con mi cabeza encontrando aquellos ojos marrones preocupados, "Estas mintiendo..kaki." su ceño se frunció negando con la cabeza y chasqueando con su lengua.
Mi sonrisa se agrandó al verla hacer el mismo gesto que mi mama hacia.
Tome su nuca dejando un beso en su frente.
"Enana" susurre rodando los ojos, "Mucho tiempo a lado de mamá..Y estas demasiado.. dramática.." me burle, apretando sus mejillas.
"Son sus novelas" dijo refunfuñando, "Ella me hace mirarlas, ¡llora demasiado Mila!" sus labios se fruncieron haciendo un puchero con ellos.
Sonrei, había desviado el tema fácilmente.. me alegraba no tener que dar explicaciones a mi pequeña hermana menor.. por el momento..
Levante la mirada encontrando los ojos de mi madre que me miraban desde el retrovisor.
Levante un ceja hacia su dirección.
"Sucede algo Mija?" Preguntó con una media sonrisa.
"No, mamá" Sonreí a medias.
"Sabes que puedes contarme lo que sea, cierto Mila" Sinuh sonrió calidamente.
Asentí sin responder. No cabía duda que si le contaba..lo que sucedía entre mi compañera de banda y yo, no estaría con esa sonrisa en sus labios..
Suspiré, agachando mi cabeza.
Dándole una mirada rápida a Alejandro.
Que me miraba por el pequeña retrovisor.
Sonrei hacia su dirección recibiendo otra sonrisa de su parte.
Llegamos a la casa, por mi parte corrí hacia mi habitación. Mientras papá y mamá harían hamburguesas, Para la cena y Sofi tenía que terminar un trabajo para la escuela.
Eran las siete de la noche.
No podía creer que no había pasado ni un día y ya extrañaba a esa idiota ojiverde.
Si idiota.
No entendía cual era su euforia en tener.. contacto conmigo así.. de esa manera.
Su temor me llegaba en partes pero no dejaba de sentirme desilusiónada.
Esa desilusión se iba con el solo hecho de pensar en ella y esos hermosos ojos verdes.
Mi cabeza estaba hecha un lío.. lo único claro en mi mente era que estaba estúpidamente enamorada de esa idiota.
Bufé quitándome la ropa para tomar una ducha rápida con el pensamiento al borde.
Enamorada de una idiota..
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"Mija" gritó mi madre en su característico español, "La cena ya esta lista":
"Ya mamá, ya voy" Grite igual en español. Deje a un lado, el control del DVD, opte por mirar una película y The Notebook era la mejor opción para el momento.