"Beep beep, beep beep" El despertador, ya eran las 10:30, solo faltaba una hora para tener que acudir a la presentación, otra vez el mismo maldito curso, gente nueva, no sabía que iba a pasar.
Bajé a desayunar, me duché, me vestí y sin ganas de ir, eché a andar hacia el instituto.
11:30, acababa de pasar al salón de actos, mire a mi alrededor y eran todo caras nuevas, solo quería irme a mi casa y desconectar, evadirme un poco de la realidad, quedarme en mi cama sin hacer nada, simplemente estar ahí, pero no podía, tenía que estar allí.
Cuando subimos a clases, nos asignaron los sitios, y justo detrás mía se sentó un chico, un poco más alto que yo, moreno, no se, un chico de lo más normal, pero a mí me llamó la atención, aunque yo no le di importancia alguna.
Cuando llegué a mi casa, por fin pude desconectar un poco, entonces, me puse algo de música y me tumbé en la cama. Y de repente se me vino a la cabeza aquel chico de clase, no paraba de pensar en el, no sabía por qué, pero no podía parar de pensar en el, aunque tampoco le di mucha importancia.
Pasaban los días y seguía pensando en él a cada momento, no me lo podía quitar de la cabeza, yo me preguntaba, ¿Por qué no puedes parar de pensar en el?, ¿Qué te pasa?, ¿Acaso te gusta?. Yo por aquel entonces tan solo tenía 13 años y estaba hecho un lío, tenía muchas preguntas pero ninguna respuesta, no tenía ni idea de que me pasaba.
Al cabo del tiempo, me fui olvidando un poco, ya no pensaba tanto en el, había conocido a un grupo de personas con las que salía de vez en cuando y podía pasar el rato.
Pero un día, conocí a aquel chico de clase, era un chico divertido, casi siempre se estaba riendo, no se, me pareció majo, lo que yo no me podía imaginar, era lo que iba a acabar pensando acerca de él...
