El Stripper ♔ Park Jimin || Adaptada

Capítulo 25

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Comienzo del maratón.

_____ se mordió el labio, e inconscientemente, sus ojos recorrieron el cuerpo de Jimin de pies a cabeza.

- ¿Quieres que te dibuje, a ti?- dijo, con la mirada fija en su camisa que escondía por debajo unos abdominales de muerte.

- Si. Creo que podrías hacer un buen retrato de mi.- sonrió y por un momento _____ se sintió seducida por su sonrisa.

- Mmh... vale. Haré el intento de dibujarte.

_____ caminó hacia las ventanas y corrió las cortinas a un lado para dejar que la luz inundara la habitación. Luego corrió un sillón, algo gastado, y lo acomodó al medio del cuarto.

- Siéntate aquí.- le señaló ella con el dedo.

Jimin obedeció y se sentó en donde le indicó. Mientras se amarraba el pelo en una coleta, _____ caminó y sacó su caballete que estaba apoyado en un rincón para posicionarla al frente de Jimin, lo suficientemente lejos de él como para verlo con claridad. Sacó todas sus pinturas y un lienzo nuevo para colocarse a pintar. Una vez lista, _____ alzó la vista y se encontró con los ojos de Jimin que la miraban detenidamente.

- Apoya tu codo en la orilla del sillón y apóyate bien en el respaldo.- le dijo _____.

Jimim obedeció. Ella frunció el ceño.

- Acomoda bien tu cabello hacia un lado.

- ¿Así?- preguntó, pasándose una mano por el pelo y despeinándolo.

- No.- negó con la cabeza. Luego caminó hasta quedar al frente de él y se inclinó un poco para hundir sus dedos en su cabello y peinarlo. Cerrando los ojos, Jimin siseó de placer y disfrutó de la sensación al ser acariciado por las suaves manos de _____. Se preguntó en qué otra parte de su cuerpo podía tocarlo, pero rápidamente eliminó esa idea de su mente. _____ quitó sus manos de su cabello y por una fracción de segundo Jimin tubo el impulso de pedirle que no parara de tocarlo.- justo así.- susurró ella.- no te muevas.

_____ se alejó para retomar su postura de antes. Los ojos de Jimin la siguieron. Alzando una mano, ella deslizó el pincel sobre el lienzo y empezó a pintar. Jimin estiró su mano y la apoyó sobre su barbilla, acariciando rítmicamente su labio inferior con el dedo índice. _____ le frunció el ceño.

- No hagas eso.- dijo ella.- me distrae.

Los labios de Jimin temblaron y _____ supo que estaba luchando contra la necesidad de sonreír, pero finalmente se contuvo y bajó su mano de sus labios.

Tiempo después, _____ ya casi estaba por terminar. Atardecía, y la luz llegaba directo a Jimin desde la ventana, iluminando su hermoso rostro.

- Ya estoy que termino.- dijo ella, alzando la vista para verlo.- ¿No estás aburrido?

- Nena, podría quedarme todo el día aquí viéndote.

_____ se sonrojó, y luego volvió a centrar sus ojos en el lienzo para terminar la pintura. Diez minutos después, _____ suspiró con satisfacción y dejó el pincel a un lado, alejándose un poco y admirando su pintura con aprobación.

- Ya terminé.- dijo _____, aún con los ojos fijos en la pintura. Jimin se levantó del sillón y se le acercó.

- Te quedó estupenda.- dijo, estirando la mano hacia la pintura con la intención de tocarla, pero rápidamente la retiró cuando _____ lo golpeó.- ¡Au! ¿Qué?

- No la toques. La pintura aún está fresca.- lo fulminó con la mirada.

Él bufó. _____ se rió.

- Lo siento, es que no quiero que se arruine.- sonrió ella. Una sonrisa tan jodidamente perfecta que hasta a Jimin le entraron estremecimientos.

Jimin clavó sus ojos en sus labios, como por enésima vez en el día. Lo tentaba.

- Lo único que quiero es besarte.- admitió.- ¿Es mucho pedir?

- Para una mujer casada si lo es.

- Pero él te engañó.

- Ya lo sé. Pero por favor, no vuelvas a repetírmelo.- dijo ella y de repente la voz se le quebró.- me duele escucharlo.

- Lo lamento.- se disculpó.- es que estoy celoso. No sabes cuánto envidio que tu esposo tenga estos labios sólo para él.- estiró su mano y acarició su labio con el pulgar. Ella se relamió los labios y él gimió.- nena, ¿No serías capas de compartir aunque sea por un segundo estos labios conmigo?

_____ lo miró. Ella también deseaba besarlo. Muchísimo.

- Está bien. Pero sólo un beso pequeño.- dijo ella, de repente sonrojándose.

- Un beso pequeño.- repitió.- con eso me basta.

Y antes de que ella pudiera volver a hablar, él se inclinó y la besó. _____ cerró los ojos y le correspondió el beso enrollando sus brazos alrededor de su cuello. Jimin gruñó cuando su lengua acarició la suya, e inconscientemente, se encontraba apegándola más a él y besándola con desesperación