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Cap. 37*

Alguna vez han sentido miedo?, bueno después de un mes encerrada en mi burbuja en el hospital tenía que volver a la realidad, un mundo lleno de burlas y críticas, donde yo era un blanco fácil, es fácil decir "Lo voy a superar" "yo puedo" cuando estas encerrada y no lo tienes que ver, pero las cosas cambien cuando tienes que ver a las personas que te critican frente a frente.

Me levante y me puse lo mismo de siempre, unos jeans, una sudadera y mis tenis, no quería llamar la atención, ya que supongo que muchos en la escuela se habrán enterado de lo que me ocurrió, baje las escaleras y estaba ahí mi mamá, me sentía tan rara de verla ahí y tener que desayunar con ella es sorprendente como cambio mi vida en un mes

-Lista?- Me pregunto sirviéndome mi desayuno
-Supongo
-Todo va estar bien- beso mi frente- apúrate que no quieres llegar tarde.

Desayune en silencio, no sabía de qué hablar con mi mama, supongo que con el paso de los días me acostumbrare a convivir con ella

-Ya me voy- Me levante y deje los trastes en el lavabo

-Suerte hija- Beso mis mejillas, me dio un abrazo y Salí de mi casa

Había olvidado como se sentía un abrazo de mi mama, sonreí y comencé a caminar, estaba nerviosa, no quería encontrarme con nadie de mi salón y mucho menos con devora y sus amigas.

-Hey¡¡ espera- Gritaron y voltee

-Niall¡¡ -Grite y corrí a abrazarlo, hace más de 1 mes que no sabía nada de el

-Como estas, pequeña

-Nerviosa...

-Bah, no hay nada de que estar nerviosa, ven vamos- Tomo mi mano y caminamos juntos hasta la escuela, sentir que tenía a alguien a mi lado me daba fuerza.

Entramos a la escuela y como siempre las miradas de los profesores se pusieron encima de mi, Niall apretó mi mano para darme fuerza, pero la verdad no estaba funcionando, me sentía débil, como si en cualquier momento fuera a desmayarme, caminas juntos hasta el salón, por desgracia no tenía clase con el

-Bueno aquí te dejo-Miro su reloj y se rasco su cabeza- Ya se me hizo tarde- Beso mi mejilla y salió corriendo

Me di vuelta y la vi, estaba ahí sentada Devora con sus amigas viéndome, riéndose, quería correr, huir de ellas, pero sabía que si hacia eso nunca paria mi pesadilla, comencé a caminar hacia mi lugar, que pos suerte, estaba lejos de ellas.

La clase trascurrió normal, gracias a dios yo no levante ninguna sospecha, excepto por devora y sus amigas, que no paraban de verme, cuando la clase termino me dispuse a salir lo mas rápido posible pero una mano me tomo del brazo

-Vean quien volvió- Dijo devora pegándome contra la pared-
La suicida

-Déjame- Intente salir de su acorralamiento pero fue inútil

-Pero si ya habla y se defiende, que linda- Dijo tocándome mi cabello

-No me toques-dije quitando bruscamente su mano de mi cabello

Devora me empujo mas fuerte contra la pared, provocando que me pegara en la cabeza

-A mi no me tocas, maldita, no se si eso de ser S-U-I-C-I-D-A sea contagioso - dijo escupiendo las palabras con odio

Y entonces no me pude contener más, es como si tomara fuerzas de un lugar donde yo sabía que no existía, empuje a devora contra las bancas, la agarre de su playera y le hable

-Sabes, eso no es contagioso, pero sabes que si es contagioso, tu maldita actitud que tienes contra las personas, eso sí es contagioso y sabes que más, das pena, que tengas esa actitud, si yo seré una Suicida, y prefiero mil veces ser eso, a una chica como tú, que esa podrida por dentro y no quiero que me vuelvas a tocar, es más ni siquiera me hables, porque ya no soy la misma de hace unos meses, de la cual te podías burla y criticar ahora se que me puedo defender de personas como tú.