La misión

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Narra Lucy.

Esta mañana muy temprano me levanté sabiendo que hoy iríamos a una misión. El grupo de siempre, Erza, Gray, Natsu y Happy. Me gusta salir sólo con ellos, y no es porque tenga algo contra los demás, pero es que así recuerdo cuando recién entré al gremio y todo era nuevo para mí. Cada paso que daba significaba una nueva aventura. Erza quería comprar unos postres especiales y terminamos todos incluídos. Era un misión fácil, la acabamos casi al instante, pero como partimos tarde la noche caía sobre nosotros.

Erza: Sería peligroso caminar por ahí a estas horas. Estamos en las montañas y es sumamente difícil ver por donde caminamos

Lucy: Tienes razón -respondí-

Erza: Nos quedaremos aquí a pasar la noche

Asentí, abriendo mi pequeño bolso como para empezar a sacar las cosas, pero el grito de Natsu hizo que todos volteasemos hacia él

Natsu: No pienso quedarme aquí

Happy: ¡Aye!

Lucy: ¿Y por qué no? -reí- Este lugar por más húmedo que sea, está más ordenado que su hogar

Natsu: Tsk -comienza a caminar solo- Le prometí a Romeo que le enseñaría algo esta noche, y eso voy a hacer

Erza le quedó mirando y esbozó una pequeña sonrisa. Supe que, ambos coincidían en no fallar a una promesa, por lo que guardé lo que antes había sacado de mi bolso. Comenzamos a caminar iluminados por una pequeña llama que Natsu tenía en su mano.

Natsu: No hay nada de peligroso en esto -mirando a Erza burlonamente- Sí incluso puedo caminar al revés

Sacándole la lengua a Erza con aire infantil, Natsu se dio media vuelta mirándonos a nosotros. De repente sentimos sonar una piedras, como si la montaña se estuviese deshaciendo. Y así era, Natsu había llegado a la orilla de la montaña; la llama se apagó y lo único oímos a continuación fue un grito de él mientras caía, al parecer era tan hondo que no pudimos saber cuando tocó el final del acantilado. Sin saber qué hacer nos quedamos mirándonos las caras un rato. Después, reaccioné y llamé a Loke para que nos iluminará el camino hacia una bajada segura. Buscamos a Natsu durante toda la noche y casi al amanecer lo vimos a orillas de un río.

Lucy: Natsu... -agarrándolo entre mis brazos- Tiene una herida inmensa en la cabeza...

La impresión ni siquiera me dio las fuerzas para llorar. Intentamos ser cuidadosos con el cuerpo de Natsu inconsciente. A través de una lacrima nos logramos comunicar con el gremio que junto a Blue Pegasus nos vinieron a buscar; llevándolo de inmediato con Porlyusica que nos pidió tenerlo con ella unos minutos para examinarlo. Al rato después, salió, y no pudimos decir que tuviera la mejor noticia para comunicarnos.

Yo seré tus ojos |Fairy Tail|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora