Episodio 3

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-No creo que sea tan difícil- dije intrigada, aun la taza de café que sostenía en mis manos estaba hirviendo haciendo que mis dedos congelados por la temperatura fría de la mañana tomen una temperatura perfecta, no sabía la razón exacta de como empezamos hablar sobre aquello pero a decir verdad era algo excitante, deje la taza en la pequeña mesa que me separaba de Harry- digo, eres guapo, talentoso dudo mucho que alguien no quiera estar contigo.


-No se trata de eso- río mientras negaba con la cabeza- es difícil, sabes? - Dio un sorbo a su café- a veces no sabes si las personas solo están contigo por el dinero y la fama o si en verdad quieren compartir su vida contigo. Es algo que nunca nadie podrá saber, solo hay que confiar en el destino y estar preparados para la mierda que nos ponga adelante.


-Supongo que tu hermano Bryan no piensa lo mismo - voltea a verme, una carcajada ronca brota desde su garganta


-Digamos que él tiene una mentalidad un poco diferente a la de nosotros- deja la taza vacía sobre el plato de porcelana - aunque para ser sinceros a veces me hubiera gustado ser como él.


Un pitido proveniente del celular de Harry hizo que la conversación terminara. Harry frunce el ceño al ver aquel mensaje, me mira preocupado haciendo que un escalofrió recorra toda mi espalda hasta llegar a la parte alta de mi nuca.


-Tenemos que irnos, hay una junta importante en quince minutos - deja en la mesilla suficiente dinero como para poder sobrevivir durante meses- tenemos que apurarnos, mi padre odia la impuntualidad y más si es una junta muy importante, vamos- toma mi mano y jala de ella como si su vida dependiera de ello, mi vista repara en la enorme mano que cubre por completo la mía y sin darme cuenta una sonrisa tonta se apodera de mi cara.


Al llegar al coche, Harry abre la puerta del copiloto y se hace a un lado para que pueda entrar, se asegura que el cinturón de seguridad este bien, levanta la vista sus ojos esmeralda me observan con diversión, antes de salir del coche revuelve mi pelo con una mano.


-¡HARRY! - suelto un chillido mientras trato de peinar de nuevo mi cabello con ambas manos, cierra la puerta, recorre la parte delantera hasta llegar al otro extremo y entra con rapidez al coche.


-¿Qué pasa pequeña?- ríe mientras se coloca el cinturón de seguridad- creo que no te peinaste esta mañana- su risa inunda el pequeño espacio del coche.


-Tonto - golpeo su brazo sin poner tanta fuerza.


-Vamos pequeña, no fue para tanto- prende el auto, maneja con rapidez tratando de adelantarse a unos carros que los manejaban como si tuvieran todo el tiempo del mundo - te hice un cambio de look - aprovecha que la luz esta en rojo y voltea a verme - cuando quieras puedo peinarte - me guiña el ojo haciendo que mis mejillas tomen un color carmesí. Al levantar la vista me encuentro a un Harry que me observa con tanta atención como si quisiera apreciar cada centímetro de mi cara.


El sonido del claxon del auto de atrás hizo que Harry diera un respingo en su lugar, acelera el auto cuando ve que solo faltan tres minutos para que comience dicha junta. Al llegar a la empresa Harry baja con tal destreza del coche y hecha andar hacia el gran edificio.

El último suspiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora