ZEUSPAN 2: Carrucel

Capitulo 32."Libertad"

OLLIE

Prepare una droga llamada "droga del amor" la cual hace que quien la consuma se pierda en el deseo y no ponga resistencia alguna a la persona o personas, dejándola vulnerable.

Tome esa pequeña pastilla en forma de corazón y se la mostré a Sahara.

-Esta pequeña pastilla, esta noche se la pondrás a David en su copa y será tuyo, te acostaras con él y esperaras una semana para decirle que estas embarazada de él-

Sahara tomo la pastilla, su cabello largo y rubio tapo la mitad de su cara mientras miraba hacia el suelo un poco insegura.

-¿Sabes? He estado pensando últimamente todo este asunto... es decir, David es un chico maravilloso, en cierto modo me duele tener que ganármelo de esta manera, no es correcto- dijo frotándose el vientre con una mano.

Últimamente Sahara se estaba poniendo muy sentimental con lo de su embarazo, no quería que comenzara a dudar todo esto era por su capricho de princesa de estar con David, solo estaba cumpliendo mi parte del trato.

-No hay forma de echarse atrás princesa- le comente.

Ella lo sabía, una princesa no podía ser madre soltera, pero tampoco quería abortar a ese bebe, estaba entre la espada y la pared.

-He estado pensando...- comenzó a decir Sahara -Si tú y yo nos casáramos... serias príncipe... después de todo este bebe es tuyo-

Yo deje salir una carcajada ... no estaba dispuesto a tener una relación con nadie y menos de forma pública, si me casaba con Sahara podría ser príncipe, era verdad, tendría las joyas de la corona a mi cuidado, empresas, títulos, influencia, todo ... menos libertad.

-Agradezco tu oferta Sahara pero... yo no le pertenezco a nadie y no quiero ese bebe ¿no lo entiendes? No quiero hijos, no siento nada por eso que estas incubando en tu vientre-

Sahara comenzó a llorar y se llevó las manos a la cara para cubrirse, sus guardias estaban mirándome con mucho odio, parecía que a cualquier instrucción de Sahara me cortarían la cabeza con sus espadas.

-Sahara... no te entiendo... tú quieres a David ¿recuerdas? O ¿ya no lo quieres? ... dime Sahara ¿Qué es lo que quieres?-

Ella estuvo solloza un par de minutos, yo sentía tensión, cualquier error podría significar que Sahara me matara, se había vuelto muy peligrosa, esto no podía seguir así, tenía que deshacerme de ella....

... Pero... ¿Matándola? No, yo no era un asesino... ese bebe era el culpable, lo maldecía, tal vez si hacia algo para que perdiera él bebe... si, eso debía de hacer, matar ese bebe que aún no había nacido.

Sáhara se quitó las manos de su rostro, se calmó, respiro profundo y me miro muy seria, con templanza, como si tuviera la respuesta.

-No le hare daño a David, lo dejare en paz, que ame a quien quiera- dijo ella -Bien, entonces se suspende el plan de que te acuestes con él- dije sin darle importancia.

-Sin embargo, ahora quiero otra cosa- comenzó a decir la princesa caprichosa, así era Sahara, una princesa que siempre debía tener lo que quisiera.

-Eres la princesa de Asturias, puedes tener todo lo que dices ... claro, siempre y cuando puedas pagarlo, la realeza últimamente está decayendo- dije en tono de burla para variar.

-Eso te gustaría ¿verdad Ollie? Verme decaída- dijo ella.

-Nunca me veras decaída Ollie, soy Sahara Fernández, princesa de Asturias y futura reina regente de España, yo no me derrumbo, cometo errores, si no lo negare pero siempre me doy cuenta a tiempo para remediarlo ... esa soy yo, todavía te falta mucho para conocerme Ollie-