Historia de Verano

Capitulo numero dos

Estamos camino al hotel en la limosina que nos contrató mi padre, Miami Beach aquí estamos. Cuando llegamos al hotel no podíamos creer lo hermoso que era, un sueño hecho realidad, siempre estuvimos acostumbradas a lujos y hoteles cinco estrellas por la posición económica que tienen nuestros padres, pero esto era mucho mejor que esto. El hotel The Setai era el hotel más hermoso en el que había estado. Cada una de nosotras teníamos habitaciones separadas, por el simple hecho de que alguna traería a alguien a dormir con ellas, lo pensamos nada más por Madison y todas estuvimos de acuerdo en que era una buena idea. Estaríamos tres hermosos meses en este lugar, viviendo nuestra vida y cumpliendo nuestro sueño de vacacionar juntas.

-Bienvenidas al hotel The Setai, me llamo Holly y estamos muy contentos de tenerlas aquí, señoritas.-sonrió una amable rubia que no pasaba los veinticinco años.- Madison Roberts tienes la habitación 400-le paso una tarjeta- esta tarjeta sirve para abrir las habitaciones ya que las llaves ya no son muy seguras.-explico- Mía Wesley la habitación 401, Sofía Ponce la habitación 402, Hilary Braum la habitación 403, Nicole Duncan la habitación 404-les entrego sus tarjetas- y Emma Williams tienes la habitación 405-me entrego una tarjeta-Cualquier necesidad que tengan en cada cuarto hay un teléfono, marcan el numero #07 y se comunicaran con recepción. Es un placer que hayan elegido al hotel The Setai para vacacionar.-sonrió.-Ellos las ayudaran con sus maletas, hasta luego-se despidió y diez hombres vestidos de rojo y blanco tomaron todos nuestros equipajes.

Mi habitación era perfecta, frente a la cama había un hermoso ventanal que daba vista a la plaza, no era tan grande como mi cuarto en casa pero realmente era hermoso. Debajo del teléfono había una guía que comunicaba con los números de las distintas habitaciones, por ende marque los cinco números que comunicaban a los cuartos de mis amigas y ellas atendieron.

-Chicas habla Emma, podríamos descansar hasta la noche y luego ir a cenar y recorrer el lugar-comente.

-Cierto, estoy demasiado cansada para salir ahora-dijo Sofía.

-Si chicas, entonces, que descansen-dijo Madison.- Nos vemos dentro de... ¿cinco horas?-pregunto.

-En cinco horas nos encontramos en el pasillo, descansen-Saludo Hi.

-Adiós muchachas-rio Nikki y colgué el teléfono.

Me acosté en la cama mirando hacia el techo y le mande un mensaje a mi madre avisándole que ya había llegado y que descansaría, por lo que contesto "Disfruten y pórtense bien, las amo". Cerré los ojos y me dormí en simplemente un segundo.

Había olvidado poner el despertador y las chicas estaban tocando mi puerta como si fueran unas locas, me levante somnolienta y abrí, allí estaban las cinco paradas mirándome con el ceño fruncido.

-Lo siento, olvide el despertador, pasen y me doy una rápida ducha ¿sí?-asintieron. Corrí hacia el baño y me duche lo más rápido posible, cepille mis dientes y seque mi cabello con el secador de pelo, salí del cuarto tapada con una toalla y las idiotas de mis amigas comenzaron a chiflar y decir piropos, reí y tome una bikini en distintos tonos verdes, me coloque crema en todo el cuerpo y me puse una pollera tiro alto, con la cintura ajustada pero suelta debajo, que me llevaba diez dedos arriba de las rodillas, color negro, un hermoso top sin mangas con escote corazón floreado en tonos rosa, naranja, amarillo y verde, unos zapatos con tacón de quince centímetros cerrados color negro. Y como accesorios me puse un collar pegado al cuello de color negro, y anillos de oro y plata. Mi cabello era rubio natural y largo hasta la cintura, lo deje con mis bucles definidos y maquille mi rostro con delineador, me coloque pestañas postizas, tengo las pestañas largas y oscuras por naturaleza, pero amo como quedan las pestañas postizas, las pinte con rímel, y me coloque un labial de color rosa chicle. Me mire al espejo y me gusto lo que había logrado conmigo.