Malú ;《Me cambió la vida》

Maratón (6/9)

-Veras...es que estoy con Sara, la chica que participo en mi equipo de la Voz Kids.

- ¡Ah, vale! Pues entonces ya vengo mejor otro día...-la corte-.

- No no, tu te quedas con nosotras. Si seguro que a Sara la encantara que te quedes.

- Bueno vale. Gracias.

- Ah y te aviso, cuando te vea lo mas seguro es que empiece a tartamudear o a ponerse roja -nos reímos-.

- Vale, lo tendré en cuenta -dijo volviéndose a reír-.

«SARA»

Mientras que estaba esperando a Malú, estaba jugando con sus perros, hasta que oí su voz.

- Sara, mira quien ha venido.

Me gire rápidamente y la vi a ella con...

- ¡Vanesa Martín! ¿Puedo darte un abrazo? -dije acercándome a ella-

- Claro que si tonta, ven pa' ca'.

Y nos dimos un abrazo. Cuando nos soltamos, la pregunté:

- ¿Te vas a quedar con nosotras a ver la peli?

- Claro -dijo sonriéndome-.

- ¡Bien! -dije alargando la e-. Pues vamos -dije cogiéndolas de las manos y llevándolas al sofá-.

Estuvimos toda la tarde riéndonos con la peli, y cuando se iba a ir Vanesa, Malú la ofreció quedarse a cenar, y ella acepto. Cuando terminamos, Vanesa se fue, y Malú y yo nos fuimos a dormir.

Una vez mas, la luz invadía la habitación y me despertaba. Malú no estaba, así que baje directamente a la cocina.

- Buenos días -dije abrazándola por detrás-.

- Buenos días -dijo girándose hacia mi-. ¿Y ese abrazo?

- De buenos días -nos sonreímos-.

- Ai que mona eres -devolviendome el abrazo-.

- ¿Has desayunado ya?

- Sí. Y te he hecho el desayuno jeje.

- Ui, ¿y que me has hecho?-dije buscando con la mirada mi desayuno-.

- Unas tortitas con chocolate, muy ricas -dijo dándome el plato con el desayuno-.

- ¡Muchas gracias! -dije dándola otro abrazo-.

- Nada, espero que te gusten -dijo sonriendo-.

- Seguro que si.

- Oye acuérdate de que tenemos que ir hoy a casa de mis padres.

- No, si no se me había olvidado. Para no acordarme...

- ¿Que pasa? ¿Ya te me estas cagando?

- Si -nos reímos-.

Me tome el desayuno, y estuvimos jugando con sus perros.

- Vamos ya para arriba a cambiarnos que son las doce y media y tenemos que estar sobre la una y cuarto, una y media -dijo levantándose y dándome la mano-.