POV's Índigo:
Salgo de casa con una magdalena de chocolate en la boca, mientras con una mano sujeto los libros y con la otra rebusco en el bolso para encontrar las llaves del coche.
- ¿Sabes? Podrías ser menos ....
Me giro hacia mi amiga que me está mirando mientras se ríe.
-No me daba tiempo a desayunar, y los libros los tenía que cojer para...¡Bingo!-saco las llaves del coche y lo abro -Venga, metete dentro que aún llegaremos tarde.
- Y que más da, es la uni, ¿quien quiere llegar a tiempo?
- Yo, y ahora entra de una maldita vez en el coche.
Miro a Becky y veo que no tiene muy buena cara.
- Oye, ¿te encuentras bien?
Pone esa cara que usa cuando está pensando en una mentira.
- No, estoy perfecta, debe de ser que me he pasado con...
Alzo la mano para que detenga el sinfín de excusas que me hiba a soltar.
- Ni lo intentes, te conozco, estás mal.-me va a decir algo pero la corto- Te quedas en casa y así te pones mejor.
- Pero tengo que ir por qué....
- Cómo me sigas contradiciendo te meto la magdalena en la boca -le enseño la magdalena ya a medio acabar, y Becky me mira con cara de asco (odia las magdalenas).
- Amas demasiado a las magdalenas de chocolate como para hacer eso -la miro con cara asesina.
- Ok, tienes razón, no haré nada con la magdalena pero tu te quedas aquí . ¿Quieres que te traiga algo?
- ¿Un diez en física y química?
- Algo real, Becky.
- Pizza ,-ruedo los ojos, típico de ella- con poca verdura, extra de queso...., mmm, ¿ya te he dicho con poca verdura?
- Sí, es lo de siempre. Si te entra hambre no cocines, pide algo por encargo, no quiero que me llamen en medio de clase porque la casa esté ardiendo.
- Ja, ja, ja, que graciosa.
- Oye, ¿ya no sería mejor que comieras algo de verduras? Digo, estás mala, así que tienes ...
- Índigo, ¿no llegas tarde?
- Dios, es cierto. Nos vemos.
Dicho esto subo y arranco el coche. Sigo pensando que Becky tendría que empezar a comer más sano, a este paso acabará como michelín y no podrá montar en el coche. Y, de ser así, tendría que bajar rodando ......
- !Me cago en todo¡ -doy un volantazo y freno de golpe.
Miro al suelo de la carretera y veo a un chico con un skate al lado.
- Oh Dios mío, lo he matado. Lo siento, lo siento, lo siento.
El chico empieza ha moverse y se levanta. Seguro es un zombie y quiere comerse mi cerebro como venganza.
- No estoy muerto y, no pasa nada -!está vivo¡, y me está sonriendo, y.... Dios, que sonrisa.- Es culpa mía, crucé sin mirar.
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Susurros del Corazón
Teen FictionMi vida se puede resumir en una mancha borrosa, que no quiere aclararse. Ya han pasado cuatro años y todo sigue igual, no duermo por las noches, tengo migraña, me falla la memoria, pero sobre todo, le sigo echando de menos. Todo me recuerda a mi her...