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Capitulo 4: El nacimiento de Catalina y Samantha

Cuando Fernando y Karime se mudarón a su nueva casa, los recién casados trabajaban duro pero para ellos no había cosa mucho más importante que el amor que se tenían el uno al otro, salían a cenar a restaurantes. Una noche llegan a su casa, Karime preparó la cena, terminarón de cenar, se pusierón a ver la televisión y luego se dirigierón a su recámara.

Cuando se sentarón en la cama, se quedarón viéndose el uno al otro por un buen rato, se dierón un beso muy intenso, se acariciaban sus rostros el uno al otro:

Fernando:(habla en susurro) -eres tan hermosa, tienes unos ojos bellos, eres encantadora, te amo-

Karime:(susurro) -yo también te amo- y el estar contigo es lo más hermoso que tengo, eres mi alma gemela-

Ambos comienzan a tener un gran romance, esa pasión que se vive entre ellos, se declararón amor eterno el uno al otro.

Ya estaban acostados en la cama dándose caricias y besos, estaban felices por estar juntos:

Fernando:(susurro)-tu eres lo más importante en mi vida, eres mi mariposita blanca-

Karime:(susurro) -te amo Fernando, siempre estarás en mi corazón , te amo con toda mi alma y con todo mi ser-

Dos semanas después...

Era un miércoles por la mañana, Karime y Fernando se levantarón para ir a trabajar.

Karime comienza a sentirse rara, siente mareos y Fernando se queda preocupado:

Fernando:-¿Karime que te pasa, te encuentras bien?-

Karime comenzó a vomitar en el retrete, se limpió el vómito, se cepilló los dientes y fue cuando tuvo un presentimiento:

Karime:(mira a Fernando con una sonrisa) -no es lo que estoy pensando, a mi se me hace que estoy embarazada-

Fernando:(preocupado)-pues no se diga más te voy a llevar al hospital para que te hagan unos estudios o saber lo que te esta pasando-

Fuerón al hospital de la universidad donde estudiarón los recién casados fuerón a la sala 25 con un médico, le pidió a Fernando que esperará en la puerta, esperó y estaba ansioso por saber que le pasaba a su mujer, el doctor le habla a Fernando:

Doctor:-señor Fernando pase por favor-

Los dos estaban esperando los resultados, ansiosos  fuerón por los resultados del laboratorio, el doctor los revisó y dijó:

Doctor:-señores, ustedes van a ser padres, Karime esta embarazada-

El matrimonio se alegró al saber que serían padres, pues se amaban y ese bebé es fruto del amor que se tenían, el doctor les dió una recomendación muy importante

Doctor:(serio)-señorita Karime sólo hay que tener una dieta equilibrada, comer a sus horas, no cargar cosas pesadas, llevará una rutina de ejercicios no pesados, venir a chacarse una vez al mes para saber su estado de salud, y usted señor Fernando cuide mucho a la señorita, trate de apapacharla, cuidarla y no hacerla enojar-

Fernando:(muy seguro)-por supuesto doctor no hay problema-

Se despidierón del doctor y salierón del hospital muy contentos agarrados de la mano:

Karime:(feliz)-¡ay Fernandito este es, el momento más hermoso de mi vida compartiéndolo a tu lado!-

Fernando:(feliz)-yo también lo estoy-

Y así pasarón nueve meses yéndose a checarla con el médico, siguiendo todo al pie de la letra con tal de que el nuevo bebé nazca bien.

Nació una hermosa niña llamada Catalina Zulema Rodriguez, ya tenían lista su recámara.

Dos años después Karime vuelve a quedar embarazada, también se sintió feliz al igual que Fernando. Pasó lo mismo que a Catalina, supierón que era otra niña, le alistarón su recámara, después de nueve meses nació su segunda hija llamada Samantha Carolina Rodriguez.

Fernando y Karime se tomaban tiempo para dedicarse a sus hijas, poco a poco las niñas crecierón, ya tenían 5 y 7 años ya iban a la escuela, los familiares del matrimonio les dierón la bienvenida con regalos, abrazos y besos e incluso hasta que crecierón, su tía Carmen las consentía mucho, las cuidaba cuando sus padres no estaban, las niñas eran muy juguetonas e incluso hacían pijamadas con sus amigas y sus primas Cristina y Thalia que las quieren como sus hermanas, cuando sus papas llegaban del trabajo, las recibían con un gran beso y abrazo, también salían a algún lugar.

Había mucha convivencia en la familia.