Capítulo 10

257 18 4
                                    

La policía llegó a los estudios y se llevaron el cadáver pero todo lo que paso no fue tan malo porque en el estudio me dijeron que debía ir al psicólogo después de la escuela durante un mes y como si ir al psicólogo no fuera tan malo, el director dijo que debíamos terminar la escena. Los chicos tenían algo de pánico sobretodo Skai, ella estaba más nerviosa que yo pero aún así terminamos de grabar las escenas que faltaban.

Cuando llegue a casa todos estaban en el living esperándome, Víctor estaba algo pensativo, es decir, tenía la mirada pérdida y no decía absolutamente nada, mientras que Libby estaba algo agitada y Maya estaba en su teléfono.

-Hijo -dijo Libby rompiendo el silencio -. ¿Seguro que quieres ir a ese baile después de lo que paso? -cuestionó

-La vida sigue después de todo -me límite a decir

Si hay algo que he aprendido de la vida es que cuando naces ya estas destinado a la muerte, mientras estés con vida debes tratar de disfrutarla. En ocasiones la soledad la soledad puede ser tu mejor compañía y es mejor cuando tienes café y buena música. La vida es un completo misterio. La vida es esa incógnita que pasas hallando en matemática pero por más que te esfuerces una vida es poco tiempo para hallar el resultado de la variable.

-Cameron puedes ir pero ten cuidado -añadió Víctor-. Hablaremos sobre lo que paso otro día

-Perfecto

Subí a mi habitación, cuando abrí la puerta encontré la ropa fuera del armario -Seguramente lo hizo aquél hombre -pensé-. Seguro pensó que yo estaba aquí y al no encontrarme registró el armario y encontró el horario de grabación -si, seguramente. Desde que pasó el verano muchas cosas raras me han estado sucediendo es como si no supiera mi verdadera identidad, se que soy actor y pueda que no le guste a muchas personas pero yo nunca he dañado a nadie como para llegar a los extremos de matarme sinembargo las palabras que le dijo a aquella misteriosa chica siguen resonando en mi cabeza «Engendro del demonio» pero eso no era lo más curioso sino la chica ¿Quien era? ¿Como habló en mi mente? Todo esto resultaba confuso, primero; fueron aquellos sueños extraños que parecían tan reales, segundo; fue aquella mujer que vi en la carretera y el misterio sujeto en motocicleta y tercero; fue el sujeto que intento asesinarme y la extraña chica.

Comencé a doblar la ropa para que Libby no se molestara conmigo, mi habitación era una porqueria se supone que debía hacerle aseo una vez por semana pero en realidad se lo hacia cada mes, cierto es que debía hacer todo lo posible para que no entrara no obstante seguí ordenado mi armario pero no podía dejar de pensar en todo lo que sucedía -¿A casó el sujeto de la motocicleta estaba vinculado con la chica que me salvo hoy? -me cuestioné, en estos momentos quería despertar de esta pesadilla o serie de misterio pero lo cierto es que esto es la vida real-. ¿Por qué me habían salvado? -era la pregunta que más resonaba en mi mente.

Por fin llegó la hora de ir al baile, mis padres no me dejaron conducir porque piensan que aquello que sucedió a dejado un gran impacto en mi mente y creen que lo mejor es que Karan conduzca.

-No puedo creer que estés creciendo tan pronto -dijo Libby quien arreglaba el cuello de mí camisa negra

-¡Ay mamá! -hice pucheros

Libby siempre se ponía sentimental cuando decía aquellas palabras, es como si creyera que toda la vida iba a ser un niño o como si de la noche a la mañana me escaparé porque estoy creciendo, en verdad me irritaba que se pusiera así.

-Mirate, estas tan guapo -replicó Libby con mucho orgullo

Tras su comentario no pude contener una pequeña risa nerviosa.

-¿Me prometes que nunca te vas a alejar de mí pase lo que pase? -propuso Libby

Ella nunca antes me había dicho algo como eso, en parte su propuesta me conmovió pero también hizo tener sospechas, ciertamente ella sabía algo que yo no sabía y para decir aquella declaración debía ser muy malo.

OscurosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora