Capitulo 3: Aleks

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Estaba en el salón de clase, voltee a ver a Aleks quien también me estaba mirando, al notar mi mirada sobre él, hizo un gesto algo provocativo con su lengua, humedeciendo con esta su labio superior a lo que yo respondí de igual manera y luego le lancé una sonrisa picara. Su celular empezó a sonar, lo sacó de su bolsillo y contesto mientras salía del salón pero cuando paso por mi lado acaricio mi brazo con delicadeza y su suave tacto me hizo estremecer. Éramos la noticia del momento.

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Estaba en clase de Judo, perdí nuevamente, ero no me importo.

-¡Dominik, Aleks, a luchar! - Escuche de pronto al maestro.

Le sonreí a Aleks mientras me acercaba y él me respondió con una sonrisa de lado. Empezamos con leves manotazos, golpes lentos y poco a poco fuimos subiendo la intensidad de los golpes, en un movimiento fuerte Aleks paso su pierna tras la mía y tiró de mis hombros arrojándome al suelo por primera vez, me levante con rapidez aun con una sonrisa en la cara, trate de atacar pero me tomo de la nuca, haciendo que cayera de nuevo, me volví a levantar ya un poco mas serio, intente atacarlo de nuevo pero él me tomo por el cuello y me arrojo con facilidad, me toque la cabeza, eso si había dolido, me levante ya un poco desesperado y me dispuse a tirarlo contra al suelo, era en lo único que pensaba en ese momento, me arroje con fuerza hacia él tomándolo por la cintura y pasando mi cabeza bajo su brazo, ambos caímos, dimos una vuelta en el suelo pero él quedo sobre mi, aun más desesperado que antes trate de quitármelo de encima, pasábamos las manos inconscientemente por nuestro cuerpo tratando de vencernos el uno al otro, él enredo sus piernas en las mías para así hacer mas difícil que me levantara, poco a poco mi respiración se hacia pesada y se escuchaba cada vez más agitada, hasta que finalmente mi cuerpo completo se relajo, cerré los ojos por un segundo y los volví a abrir, viendo a Aleks directo a los ojos, él me miro confundido y soltó el agarre de sus piernas lentamente, de apoco una sonrisa se escapo de sus labios, pero no era una sonrisa como las de antes, se estaba burlando, su mirada fue directo a mi entrepierna mientras se levantaba, al igual que él mi mirada se dirigió a mi entrepierna, pude notar de que se burlaba, tenia una húmeda y gran erección.

- ¡Demonios! - Dijo Aleks levantándose por completo, para luego soltar una sonora carcajada.

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Después de aquel incidente salí corriendo directo a los camerinos, estaba muy avergonzado, llame a mi chófer a su móvil.

- Hola, ¿puedes pasar a buscarme? - Dije por la bocina de mi teléfono celular mientras sacaba mis cosas de el casillero que tenia asignado.

- Pero falta una hora... - Contesto mi chófer.

- Ya terminamos, búscame ahora. ¿Dónde estas? - Le conteste un poco irritado.

- Estoy del otro lado de la ciudad. - Contesto el como si nada.

- ¿Dónde estas? - Le dije molesto y alzando el tono de mi voz.

- Puedo llegar en una hora... - Me molesto aun más el cinismo con el que lo dijo.

- Pero ya terminé, ¿Entiendes? ¿Cuando vendrás? ¿En 10 minutos? - Dije ya desesperado, me quería ir de ese horrible lugar ahora mismo.

- Tenemos un horario, un plan diario. - Dijo como si no lo supiera.

- ¡Conozco el plan! ¡Conozco de memoria el plan! - Empece a gritar por la bocina del celular - ¡Tienes que estar aquí, esperándome! ¡Tienes que estar esperándome, tienes que estar aquí para mi! - Cada vez subía más el tono de mi voz y se me dificulto respirar - ¡Mierda! ¡Tienes que protegerme, quedarte conmigo todo el tiempo! - Me había enfadado de verdad, empece a gritar aun más y al borde de las lagrimas dije - Listo, haz lo que quieras, me voy a casa solo ¡SOLO! - Finalmente con toda la ira que tenia acumulada lance el teléfono celular volviéndolo pedazos y golpeando los casilleros.

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Ya en el autobús aun iba irritado por aquello que paso en clase de judo y la discusión con mi chófer así que no estaba de humor para nada, alguien dentro del autobús estaba escuchando la música más despreciable del mundo, la música Techno, pensé que lo soportaría gire la cabeza hacia atrás para ver de donde venia aquel molesto ruido. Al girarme vi a un muchacho, no mucho mayor que yo, iba bailando al ritmo de la música que tenia, ¿acaso no sabia que había algo llamado "Audífonos"? Volví a mirar al frente, pensando que podría ignorar aquel ruido, pero no pasaron ni cinco segundos cuando ya me estaba levantando de mi asiento fui directamente a donde estaba el chico.

- Apágalo. - Le dije un poco irritado, el me miro sin entender y me ignoro - Te dije que lo apagues. - Ese sonido me estaba sacando de quicio. - Apágalo - Le repetí pero el no decía nada, se limitaba a mirarme.

- ¿Por qué? - Me dijo sin entender.

- Apágalo - Fue lo único que le dije.

- ¿Por que? - lo repitió con el mismo tono de antes.

- Porque odio la música techno. - Dije mas enfadado aun.

- Vuelve a tu asiento - Dijo el chico junto a el.

- No hablo contigo - Dije con el mismo tono enfadado de antes.

- No se con quien hablas. Pero yo te hablo a ti. Vuelve a tu asiento. - Me dijo aquel chico irritado.

Me di la vuelta con la intención de volver a mi asiento, pero aquel chico se negaba a apagar la música, a mitad de camino para llegar a mi asiento la música volvió a molestarme y me di vuelta para encarar de nuevo a el chico de la molesta música.

- Apágalo, ¿Entiendes?

- ¿Cual es tu problema? - Me pregunto aquel chico molesto.

- Apágalo - Le repetí

- ¡No quiero! - Me dijo él con el mismo tono que yo.

- Apágalo - Le lancé un golpe el cual me devolvió enseguida empezamos a empujarnos y golpearnos, algunos de los pasajeros del bus decidieron meterse en la pelea mientras otros huían despavoridos o simplemente decidían ignorar aquel incidente.

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Lamento la tardanza, he estado algo ocupada estos días.
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