»1era parte.

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Holmes Chapel, Inglaterra.

Louis venía caminando por las calles con la mirada fija en el piso, pateaba una que otra piedra pero su semblante triste no cambiaba y es que lo habían despedido de su trabajo, luchó tanto por conseguir ese puesto y por una pequeña distracción perdió aquel trabajo tan soñado. Sacó las llaves de su casa con la esperanza de llegar ahí y encontrarse con su novia, Eleanor, pero la realidad era otra; al entrar a casa lo primero que vio fue un par de tetas que conocía a la perfección, pero esta vez no estaban siendo tocadas por él, sino que por otro hombre al cual Louis nunca en la vida había visto, debería haberle creído a su amigo Zayn cuando le dijo que su novia era una zorra y lo estaba engañando, obviamente el ojiazul no quiso creer en sus palabras, quiso hacer caso omiso y cerrarse creyendo en una realidad que el más que nadie sabía que no existía.

—Eleanor. — Carraspeó Louis aguantando sus lágrimas «¿puede ser peor este día?» pensó el ojiazul.

La chica giró su cabeza bruscamente y miró a Louis horrorizada, las palabras no salían de su boca, ella sabía perfectamente el error que cometió, era una zorra al haber engañado al castaño y eso no lo negaría, el otro chico se las arregló para tomar sus cosas y salir por la puerta apurado antes de recibir alguna golpiza que Louis podría propinarle. Y Louis no le prestó atención, no tenía ánimos siquiera para enfrentar al amante de su novia.

—Louis... — Eleanor bajó la cabeza, sabía lo que venía a continuación.

—Hoy me despidieron del trabajo, acabo de quedar cesante y lo único que quería era llegar a casa y ver a mi novia, esperar a que ella me consolara un poco pero me encuentro con esto, no seré duro contigo, no te gritaré, pero si te pido ahora mismo que tomes todas tus cosas y te largues, no quiero volver a verte jamás— Louis hablaba pausadamente, estaba tan agotado que ni fuerzas tenía para gritar. —Me daré una ducha y luego saldré a realizar algunas compras y de pasada ver algún nuevo trabajo, cuando llegue, espero que ya no estés aquí.

Dicho eso, el ojiazul se fue directo a la ducha y se dio un baño para relajar su cuerpo de la tensión del día, realmente este no era su día, estaba seguro que si se miraba al espejo vería a un Louis con una nube gris encima de él, como signo de mala suerte. Dejó que el agua corriera por su cuerpo y cerró sus ojos, esperando y ansiando que ese día terminara luego. Después de terminar su baño y arreglarse un poco, salió de su habitación y el resto de la casa estaba vacía, de seguro Eleanor ya se había marchado «y así fue como terminó, así de rápido, pero que jodida es la vida».

Tomó su celular y salió de la casa caminando directo al centro de la ciudad, gracias a Dios su pequeña casa quedaba cerca del centro y así podía caminar, no había nada que le gustase más a Louis que las caminatas, solo que en estos momentos odiaba a quien se le cruzara, estaba deprimido, no extremadamente, pero lo suficiente para caminar con la vista directo al suelo, las líneas del pavimento era lo único que Louis podía ver «putos árboles, puta gente, putos autos, putos departamentos, putas casas, puto ruido, puta Eleanor». Es que en serio su mente no lograba procesar el hecho de su pérdida de trabajo, el engaño de Eleanor, ¿Qué venía ahora? ¿Un rayo cayendo sobre su cabeza? Sacó su celular y marcó el número de Zayn, necesitaba escuchar la voz de su amigo marica, ¿Quién mejor que Zaynie para estos momentos? Recordaba cuando el moreno le confesó sobre su condición, estaba desesperado y asustado, creyendo que Louis prácticamente iba a golpearlo porque le gustaban los chicos.

—Louis, yo... bueno, verás. Jesús, esto es más complicado de lo que pensé, pero eres al primero al que se lo digo porque eres el idiota que más me importa en este mundo— Zayn sudaba y los nervios no podían ser más notorios.—  Megustanloschicosytengounnovio.

Clarity :: larry {terminada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora