Recuerdos de ilusiones [NicoMaki]

Falsa realidad

Capitulo 3

-¿maki?- pregunto más seriamente luego de ver que me quedaba en completo silencio y detenía mi paso-

-te quiero- dije con dolor y reanudando mi caminata hacía el comedor.
"mentirosa" me regañe, "eres...una maldita cobarde"-

-me alegro de oirlo- habló finalmente tomando asiento en una de las sillas de la gran mesa que estaba en el dicho lugar-

En silencio, hice la misma acción, en una de las sillas próximas a él.
El desayuno constaba de cosas triviales y comunes, por lo cual no era lo suficientemente llamativo como para dedicar mi tiempo a observar cada una de las cosas o hacer comentarios como "se ve delicioso", asi que solo me dediqué a comer, manteniendo aquel incómodo silencio y sufriendo por dentro por las forzosas palabras que habia dicho anteriormente.

-gracias por la comida- murmure luego de terminar, poniéndome de pie y retirando los utensilios que habia ensuciado-

-ah, yo lavare los platos- ofreció retirando de la mesa rápidamente los suyos- tu deberías descansar, como dije, no te veias muy bien cuando llege ayer a casa-

-...esta bien- di fríamente en respuesta dirigiendome de nueva cuenta a nuestra habitación-

Al llegar me deje caer pesadamente en la cama, haciendo esto que crujiera un poco, estaba realmente exhausta, ser medico era, incluso más, difícil de lo que yo habiá creido que sería.

Acurrucandome con las frazadas intente dormir, pero me fue imposible, me sentía ansiosa, "¿ansiosa de que?" Quizá no era puramente ansiedad lo que sentía, pero era casi el mismo sentimiento. Acomodando mi cuerpo en variadas posiciones en la cama, intente nuevamente ejercer a la fuerza un rato de sueño, "¿que diablos es lo que no me deja dormir?" Pensé sentandome en la orilla de la cama mientras que la irritación al no poder realizar lo que quería iba creciendo dentro de mi.

-...voy a salir- anuncié a Takeshi luego de ponerme un abrigo y salir de la habitación, simplemente creí que si no podía relajarme durmiendo, debería buscar otra manera-

-eh? P-pero estas enferma...- titubeó en respuesta-

-ya te dije que estoy bien, te preocupas demasiado- hablé acercándome a la entrada del departamento, colocandome mis zapatos- volvere pronto, solo saldre a caminar por un momento-

-...de acuerdo- le escuché decir antes de cerrar la puerta tras de mi-

Ya fuera, di un pesado suspiro para botar todo aquel aire que habia contenido inconscientemente dentro de mi. Dije que saldria, si, pero...¿a dónde ir exactamente? Ir a el centro de la ciudad era una completa estupidez tomando en cuenta que mi intención era de plano relajarme, además de que por mucho que lo detestara, el rostro de aquella chica pelinegra estaba en cada calle y anuncio de el lugar, ya que al ser una estrella en ascensión y además local, iba ganando popularidad rápidamente. Luego de descartar varior lugares demasiado frecuentados en akibahara, ya que queria estar en tranquilidad, decidí por ir a un parque al cual solía ir luego de clases cuando asistía a otonokizaka, si...un parque que solía visitar con ella en mis tiempos de estudiante, momentos de felicidad que jamas voleverian a repetirce en un futuro cercano ni en uno lejano.

Me senté en un banco del parque observando el lugar con nostalgia. Era extraño, antes, en mis recuerdos, este lugar era unos de los parques mas visitados y mas cuidados de la zona, y ahora en ese mismo parque estaba yo, sola, viendo como los juegos para los pequeños que habian ahí, se oxidaban por el poco uso que se les brindaba y hacian que el lugar perdiera su hermosura. "Como cambian las cosas eh...?" Pense un momento antes de dirigir mi vista a unas palabras que habían llamado mi atención escritas en una de las tablas de la banca.