Capitulo 1

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James Harrison

--Señor hoy ira a trabajar.

--Si Troy hoy ire prepara mi auto por favor ya caso salgo en 10 minutos.

Esta bien señor. ¿Que carro gusta llevar?

-- Hoy esta perfecto para mi Veneno.

--Buena eleccion señor, lo espero.

-- Gracias Troy.

...

Señora Smith:

--Señor de verdad ira a trabajar.

--Si debo vigilar mi empresa, hay problemas y debo arreglarlos.

--Esta bien señor le hare su desayuno preferido.

-- Muchisimas gracias.

10 minutos luego.

--Su carro esta listo señor, aqui estan las llaves.

--Gracias te veo en la oficina.

--No se aleje mucho señor, ire detras suyo.

-- Ire a 100Km/ph, asi debe ser suficientemente lento para ti.

--No es gracioso señor, debo cuidar de usted.

-- Sabes que me cuido solo. Tu eres solo mi ayudante y ya.

--Disculpe señor no quería no quería incomodar.

--no te preocupes pero deja ya eso. Te veo en la oficina.

--De acuerdo.

--mi bello veneno, si fueras mujer y si yo creyera en el matrimonio, me casaría contigo.

Mi oficina que en el centro de londres, soy dueño del banco central de inglaterra, puedo decir de que soy el dueño de inglaterra todo dinero pasa por mi y mi empresa, se cuanto posee cada quien...

--tomo la autopista principal y acelero, mi veneno ruge en la carretera queriendo ir mas rápido pero debo ir a 100km/ph para no matar a nadie.

Suena mi telefono y lo contesto con el volante del auto.

--James Harrison.

--Señor llegare un poco tarde voy por sus trajes a la lavanderia.

-- gracias Troy por informarme.

--Bueno señor.

Cuelgo y freno de golpe, al ver que me pase la desviacion a mi empresa. Doy reversa y entro en ña intersecion que me habia pasado.

Llego a Banco, desde que voy entrando al parque veo que todo esta mal, tomarme 7 meses de vacaciones es bastante y dejar a alguien a cargo no esta bien.

Mi lugar en el estacionamiento ocupado por un porche 911 que sin duda no es mio, aparco a la par de el, tomo la llave de mi lamborgini y le rayo la puerta al porche.

--así aprenderá que es mi espacio, incluso si no estoy.

Me dirijo a mi ascensor, se abren las puertas, entro y la voz de Tomas de seguridad sale por los parlantes del ascensor.

--Señor no pensé que llegaba hoy.

--Es mi empresa Tomas puedo llegar cuando yo quiera.

--Si señor tiene razón.

--NO DIGAS QUE LLEGUÉ.

--Esta bien señor.

Preciono el código de mi oficina y empieza a subir.

Se abren las puerta y me encuentro en mi oficina. Le hecho un ojo, y veo papeles tirados, una silla distinta, mi retrato de la pared no esta. Me invade una ira muy grande, y quiero matar al que se atrevio al estar en mi oficina.

Me siento en la silla, algo incomoda e de decir; enciendo el intercomunicador que da con mi secretaria.

-- Sofia... a mi oficina de inmediato

------- si señor!

Entra una joven pelo negro, baja con tacones negros, falda negra y una blusa blanca, con su portafolio de apuntes y unos sexys lentes que resaltan sus ojos marrón.

--Señor disculpe no sabia que habia llegado.

--Lo sé, nadie sabe correcto?

--No nadie sabe. Pero perdone la pregunta, pero como estuvo sus vacaciones.

-- Eso no importa pero si quieres saber, aburridas.

--Me hubiera gustado alegrarse señor.

Aparte de ser una excelente secretaria, Sofia siempre habia sido mi juguetito de estrés, cuando sentía que iba a estallar de estrés, la llamaba y me la tiraba, en casa o en la oficina; todo era genial hasta que un día quiso adentrarse mas en mi vida, y la verdad eso no me gusto, ahi fue donde murió mi interés sexual en ella.

--no gracias estuvo bien asi.

--te lo pierdes.

--lo dudo Sofia.

--¿quien a estado aqui en mi oficina.?

Enamorando a la bestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora