Epílogo

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El dinero escaseaba nuevamente y como siempre Brisa decidió ir por el camino fácil.
Un día de octubre hacía frío y Brisa esperaba en la sucia habitación a que llegara su cliente.
Mañana cumpliría dieciocho años y por fin lograría ser libre y trabajar en un asunto en el cual no implicara su cuerpo como principal atracción.
Para su sorpresa esta vez no fue un victimario común y corriente.
Un 23 de octubre el padre de Brisa ingresó por la puerta del motel , atentando en contra de la voluntad de la chica. Quien sufrió desgarros en las zonas más delicadas de su cuerpo, pero que a su padre o bestia, conocía a la perfección.
Brisa intentó pedir auxilio , pero el lugar no estaba autorizado así que no por ningún motivo llamaron a las autoridades. Hasta que luego de dos días una vecina sintiera que un putrefacto hedor intervenía en una de las habitaciones del edificio.
Luego de horas y cinco puñaladas Brisa Montagna fue encontrada muerta.
-BASADA EN HECHOS REALES-

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