Adicta

42 4 1
                                    

Sus ojos son mi adicción, nunca he sido adicta a nada, pero puedo decir con certeza; que el me ha convertido en una adicta, mis impulsos pueden más que mi recistencia de controlarme ante el, y aunque nunca se lo diré directamente, no significa que no lo siga pensando constantemente.
Porque, el es peor que la droga. El es peor que cualquier sustancia, que no puedes dejar de consumir por miedo a morir sin ella.

Frágil Donde viven las historias. Descúbrelo ahora