Somos masoquistas por excelencia, amamos a quien no nos ama, nos aferramos a aquello que nos lastima y damos hasta el último suspiro por quien no mira nuestros sacrificios.
Sin embargo, no miramos a aquel que da todo por nuestra felicidad, no notamos ni percibimos al que siempre esta a nuestro lado, cuando el que tanto anhelamos nos ha dejado en las riendas del olvido.
Somos masoquistas, por el simple hecho de aceptar lo que nos hace daño; y aún siendo conscientes de tal magnitud, permitimos que el corazón forme parte de un juego de diversión.
Hemos sido personas, que no conocemos nuestro valor y somos ignorantes ante la vida, preferimos sufrir que salir de las ataduras.
¿De qué tenemos miedo? De ser más fuerte de lo creíamos? O ser más débiles cuando nos creíamos fuerte?
No sabemos la respuesta, hasta que caemos en un punto, donde debemos enfrentar la realidad
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Frágil
RandomLos sentimientos, es lo único que no podemos controlar los seres humanos, y no porque seamos debile y vulnerables, es que simplemente fluyen con tanta naturalidad, que es imposible detenerlos, porque son lo suficientemente necios y sordos ante las a...
