Capítulo uno

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Abrió los ojos lentamente para que la luz insistente de una lámpara no le dañara los ojos.

-¡Ha despertado!- exclamó una voz femenina- ¡El sujeto P05 ha despertado!- volvió a repetir

Azul miró espantada a la dueña de aquella voz.

Enseguida recordó el cuerpo inerte de su madre tendido en el suelo junto a un hombre que le apuntaba con una pistola.

Los ojos le empezaron a arder en lágrimas, de furia, de dolor, de impotencia y de muchos sentimientos más

-¡Habéis matado a mi madre!- gritó en un llanto- ¡La habéis matado!- gritó mas fuerte mientras lloraba y forcejeaba por desatarse de las esposas que la amarraban a la cama

-El sujeto P05 se esta poniendo agresivo, necesito refuerzos, repito, necesito refuerzos- habló la doctora por un comunicador

En seguida dos doctores entraron a la habitación arrastrando un carrito metálico lleno de liquidos de todos los colores y agujas

-¡Sueltenme! ¡La habeis matado! ¡La habeis matado!- sollozó

-¿Ptr4?- preguntó uno

-Ptr4- confirmó el otro

Uno de los dos médicos cogió una jeringuilla de líquido negro y se acercó a Azul para inyectarselo en el brazo

-Sujetala- mandó este

El otro médico la sujetó como pudo intentando que se moviera menos.

Azul lloraba lloraba. Estaba confusa y asustada, lo único que quería hacer era despertar de aquella horrible pesadilla y abrazar a su madre. Pero no despertó.

El médico le inyectó todo el líquido que ahora fluía por sus venas.

Cada vez le costaba mas mantener los ojos abierto o hacer algún movimiento.

Antes de quedarse inconsciente pudo oir el sonido que hacían varias pistolas al apretar el gatillo acompañado de ruidos de cristales al romperse pero no sabía hasta que punto aquello que oía era real o era el delirio producto de aquel oscuro líquido

***

Se levantó sobresaltada.

Una capa de sudor frío cubría su cuerpo, su respiración era agitada, su pulso acelerado y su cuerpo temblaba bajo las mantas.

La peor pesasilla de todas, y la mas real. Pensó mientras acurrucaba entre las mantas buscando la calma

Sintió un pinchazo en el brazo derecho. Enseguida se destapó para obserbar la pequeña perforación de su piel que aquellos doctores le habían hecho.

Entonces se dio cuenta de que esa no era su habitación y que todo lo sucedido era real

Se levantó de la cama aterrorizada mientras la escena de la cocina se reproducía una y otra vez ante sus ojos

-Vaya, veo que te has despertado, ¿qué tal te encuentras?- escuchó una voz a sus espaldas

Se giró inmediatamente temiendo ser atacada de nuevo

-¿Quién...Quién eres?- preguntó en un susurro con la voz temblorosa

-Soy Alex

El chico tendría mas o menos 17 años, la edad de Azul.

Era alto y musculoso, con un rostro algo aniñado. Tenía unos ojos grises grandes y expresivos. Su pelo era corto y castaño

-¿Dónde estoy? ¿Qué ha pasado? ¿Quiénes eran esos?- preguntó en un susurro

-Estamos en la guarida, te hemos sacado de un laboratorio, esos eran científicos

Con esas respuestas, Azul estaba mas confusa que

Alex pareció notarlo

-¿No sabes nada?- Azul le miró sin entender- ¿Sabes qué querían aquellos científicos?- ella negó- ¿Sabes quién eres?

-Soy...soy Azul....- respondió ella dudosa ante la extraña pregunta

Alex se sentó en la cama, Azul la siguió

-Enseñame tu muñeca derecha- Azul le enseño la muñeca, la cual tenía un tatuaje de un zorro con corona- ¿Sabes quién te hizo el tatuaje?

Ella se encogió de hombros

-Dice mi madre que me lo hicieron cuando era pequeña, que ella decidió hacermelo porque mi abuela lo quiso, ¿Por qué?

Azul no podía estar mas perdida, pero, por lo menos, se mantenía distraida y no pensaba en su madre

-Mírame- Azul bajó la mirada al suelo, no le gustaba que le mirasen a los ojos- Vamos, mírame

-¿Por qué?- preguntó ella desconfiada

-No voy a hacerte nada, solo quiero ver tus ojos- Azul le miró a los ojos

Él se acercó mas.

Entonces Azul pudo apreciar una pequeña mancha azul en el iris del ojo derecho.

-¿Tienes heterocromia parcial?- preguntó Azul entrecerrando los ojos

-¿Qué?- preguntó Alex volviendo a su pose original- No, no es heterocromia....

-Entonces, ¿Qué es?

-Lo mismo que tienes tú pero menor

-Pero...pero lo mio es heterocromia completa- dijo Azul sin entender

-No, eso no es heterocromia, y eso- señaló a su muñeca- no es un tatuaje que te haya hecho tu madre o tu abuela

Azul procesó sus palabras.

Su ojo derecho era verde y el izquierdo azul. Claramente tenía heterocrimia.

Y en su muñeca....eso se lo hizo su madre. Ella misma se lo dijo, ¿por qué habría que mentirle?

-Estoy segura de que tengo heterocromia y un tatuaje

-¿Nadie te lo explicó?

-¿Explicar? ¿El qué?

-Nuestro origen

-¿Origen? ¿De qué hablas?

-Azul, tu no eres humana

Cuando el Sol se apagaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora