Dominio y sabotaje

Si juegas hazlo bien

Después de la juerga del tema de Verone, todo está, como siempre hecho una mierda.
Putas en el suelo, drogas, cristales rotos...y un móvil que suena.
- James el guapo, empieza a despertar, tenemos un pastel que repartir.- Es Derek.
- Enserio tio, ¿a las ocho de la mañana?- contesta James, un poco cabreado.
- Y agradece que no sean las seis, en media hora en el almacén, ser puntuales.-
Maldito el día que encontraron el camión con las armas, todo estaba bien, palos sin muertes ni polis siguiéndoles. En cambio ahora, trabajando para un tío que ni conocen, con muchos riesgos y lo peor de todo con coches.
- ¡Chicos! El latín lover nos espera en el almacén. Moveos joder. -
Ponen rumbo al almacén, allí se cambiaran de ropa, no se puede ir en traje y montar una Harley Davidson, es un crimen.
Cuando llegan allí, un Rolls Royce enorme está esperando. Allí está Verone. Derek se baja del coche y le indica a James que se suba.
-Me alegro de verte James.
- Si tío ¿qué pasa ahora?Me dijiste que me llamarías, no que me acosarías a las ocho de la mañana.
- Lo sé pero esto es importante, hoy haremos un reparto normal, iréis hasta Tacoma, con los carros que os he dado tardaréis nada y menos en ir y venir. Y esta noche quedamos a las once en mi club, el Luna Rosa. Quiero daros la bienvenida a mi pequeña "familia".
- Vale tio, ¿qué repartimos exactamente?-
- Llevaréis Glocks y M16. Una docena de cada.-
- Eh Verone, eso es mucha carga para cruzar medio mundo, ¿entiendes?, nos pueden parar en cualquier zona, además estamos fichados por la poli, aunque no hayamos hecho nada si nos ven, solo por gusto nos tocaran las pelotas y las armas.-
- Relájate blanquito, sois seis coches, quedará bien repartido, iréis separados para no levantar sospechas. Teneis buenos coches James, no hay de qué preocuparse.
- Si nada nos preocupa.- dice James con ironía. 
- Exacto, esta noche.-
James se baja del coche y se va con los demás.
- Una docena de Glocks y M16, hacia Tacoma. Sugiero que nos vayamos ya. -
James esta muy desanimado con todo esto, las cosas no iban como esperavan todos ellos. 
- Eh James ¿estás bien?-
- Si Phill, estoy bien, pero hay que buscar la forma de librarse de este tío, nos arruinará como club.-
- Eso es cierto, pero todo saldrá bien. Coméntale algo de esto a Elaine, nos vendría bien.-
- Si eso haré.-
- James, antes de que nos pongamos en marcha, he estado estudiando con los chicos una alternativa de negocio, solo necesito tu aprobación.-
- ¿De que se trata hermano?-
- De un centro de masajes, pero con derecho a hacer algo más si el cliente lo desea, ya sabes. Serán masajes relajantes, así cualquier señorita puede atender y nos ahorramos contratar fisios. Si nos das la aprobación, te contaré los detalles cuando podamos.-
- Suena muy bien Steve, encargate de que nos den todas las licencias, si a ti no te lo dan pon el centro a nombre de alguna chica que esté limpia de marrones, ¿estamos?-
- Si tío, gracias. 
Los chicos ponen rumbo a Tacoma, realmente no sabían que se iban a encontrar, trabajar con Verone tenía la desventaja de que nunca sabes con quién te vas a ver ni donde.
- Al habla James.-
- James, te envio la dirección de la entrega al gps, el tío con el que vais a intercambiar se llama Bobby, os estará esperando allí.
Verone cuelga el teléfono y James sigue pensando en los siguientes trabajos que tendrán que hacer para el, han estado investigando un poco y es el mayor traficante de armas de todo el estado y también controla parte de Europa. Lo más preocupante de todo, esque seguramente cuando no los necesite les meterá una bala en la cabeza, para no dejar cabos sueltos, la duda es ¿cuándo?. 
El gps indica que están apunto de llegar a su destino. Hay que prepararse.
- Todos armados, no sabemos lo que hay ahí afuera.-
Llegan al destino, es difícil saber quién es Bobby sin una descripción física.
- Hola caballeros, buscamos a Bobby, de parte del señor Verone, traemos sus cosas.- dice James muy educadamente.
- Si, yo soy Bobby. Después de saber quién soy jamás me volverás a ver por aquí, mis hombres harán el intercambio.-
- Eh...está bien. Chicos sacad las cajas.-
Los hombres de Bobby comprueban que este todo, pero los Hell Riders se dan cuenta de que uno de los hombres de Bobby, haciendo el registro se le escapa un paquete, parece un fardo de cocaina. Todos alucinan, este no era el "trato" que tenían con Verone, solo armas.
- Eh está todo ¿no?-
- Si.-
- Esta bien dame el dinero, nos tenemos que ir.-
A James le lanzan tres bolsas deportivas llenas de billetes, que no los cuenta.
- Vamonos chavales.- ordena James.
- ¡Eh chico, no des alarma de lo que has visto o te vuelo la cabeza!-
El grupo ya está subido en el coche camino al Luna Rosa, tienen curiosidad de saber que es lo que se encuentran allí.
El Luna Rosa es un sitio bonito, es todo blanco con luces rosas, bolas de cristal con chicas dentro bailando, un festival.
Una vez en la puerta, un segurata enorme les frena el paso.
- ¿Estáis en lista?-
- Pues no lo sé tio, nos invita el señor Verone.- contesta James.
- Está bien pasar, Eva os acompañará dentro.-
De la nada sale esa mujer llamada Eva, una sudamericana muy agradable, que los lleva al centro del club. En una sala a lo lejos se ve Verone con una chica muy guapa, que despierta la curiosidad de James.
- Ya pueden pasar, el señor Verone les está esperando.- Eva vuelve a salir de la nada, tiene mucha discreción.
Van hacia el reservado, la chica guapa de Verone abandona la sala cuando ellos entran.
- Buenas noches caballeros.-
- Hola Verone.-
- Es guapa, ¿verdad?-
-Si mucho, es preciosa.-
A James le incomoda esta situación, algo no le gusta.
- Tomaos algo, nos vemos en la otra sala, mis hombres os guiarán.- dice Verone.
No tienen ganas de tomar nada, se sienten abrumados con tanto lujo y pijerio, así que se dirijen directamente a la otra sala. Esta está mucho más escondida que las otras, no se ve y te pierdes por sus largos pasillos.
Cuando entran en la sala no pueden dar crédito a lo que ven.