Capítulo 11

3.4K 65 1
                                    

Kim estaba completamente destrozada, era algo que podías ver en sus ojos, me necesitaba, por lo que le aconseje que se quedara conmigo, si sus padres se enterraban, que eran igual de impulsivos que Kim, irían ellos mismos a golpear a John y a pesar de que no sonaba como tan mal idea en el momento, se que Kim no lo hubiese querido así.

-Kim tranquila -Apenas dije eso me arrepentí, son las típicas palabras que dice alguien creyendo que te hará sentir mejor pero la verdad no ayudan en nada, en ese momento estábamos las 2 acostadas en mi cama yo tocando con cariño su cabeza, estando ahí sabía que al final de día tener a alguien aunque sea solo escuchando sus sollozos era mejor que a que se encontrara sola.

De pronto siento piedras chocando con mi balcón, Iim y yo ya nos encontrábamos casi dormidas, me extraño tanto, Kim me miro con cara de extraña y se levanto de mis piernas para que yo pudiera ir a ver al balcón. La verdad es que me encontraba un poco asustada, pero las posibilidades que u ladrón tirara piedras a mi ventana antes de entrar eran mínimas asique abrí la puerta y me sorprendí con lo que encontré.

-Kim ven -dije ansiosa

¿Ahora que Mia? - claramente su tono no era de entusiasmo como le mío pero sabía que le gustaría lo que vería.

Al mirar hacia abajo la cara de Kim se iluminó Adam estaba abajo con su banda, no sabía cómo los había conseguido en tan poco tiempo, bueno la banda no estaba completa pero era lo necesario para cantarle a Kim corazones invensibles.

Cundo comenzó el coro comencé a cantarle a Kim, sabía que el canto no se me daba tan bien, asique intente cantar lo ams despacio posible y dejarle el trabajo a Adam mientras abrazaba fuertemente a mi mejor amiga.

-"Si vas en caida libre y te sientes derrotada yo me entragare en el alma para curar tu dolor"- Cantaba Adam.

Kim me abrazó, tenía esta pequeña sonrisa en su rostro, sus ojos aún seguían inchados de tanto llanto y bastante rojos, pero al menos se le sentía un poco más calamada, después de abrazarme bajó rapidamente a abrazar a Adam, yo lo veía desde el balcón no podía creer que el amor de mi vida hiciera todo eso y nisiquiera por mi sino por mi mejor amiga, para ser sinceros Kim y Adam tenían una química especial, siempre se llevaron bien, eran consejeros del uno y de otro, lamentablemente el se tendría que ir a la mañana siguiente pero en ese momento solo podía pensar en lo bien que había hecho al elegir un hombre como el.

Kim abrazo fuertemente a Adam y este levanta la cabeza para mirarme.

-Gracias- Susurro suavemente para que el solo pueda leer mis labios.

Los chicos comenzaron a empacar las cosas, Adam los ayudó y se despidió de ellos, dandome a entender que se quedaría.

-Gracias chicos- grite por el balcón y los chicos de la banda me hacían señales de despedida desde la camioneta.

Al subir Kim venía abrazada de Adam, no lo dejaba ir, antes de entrar Adam me miraba como pidiendo ayuda porque lo abrazaba tan fuerte, creo que Kim necesitaba algo como lo que hizo hoy Adam por ella, necesitaba una distracción, necesitaba darse cuenta del amor que producía, del amor que podía encontrar con nosotros, que no estaba sola. Kim era probablemente una de las personas más alegres que había conocido, pero cuando alguien la decepcionaba y cosas así pasaban se cerraba por completo y ahora al menos nos dejaba estar ahí, loq ue Adam había hecho probablemente la hizo tener felicidad.

-Bueno creo que he llorado demasiado, iré a quitarme todo el maquillaje corrido de la cara- dijo Kim con un mejor ánimo, se que talvez fingía pero al menos eso significaba que quería mejorar.

-Bueno, talvez este un poco corrido, de todas formas te ves preciosa-le deje un beso en la mejilla y ella se dirijo al baño tomando mis toallitas desmaquilladoras primero.

-¿Que hice yo para merecer al mejor chico del mundo? Gracias por eso-dije abrazando a Adam por la cintura, era el hombre perfecto, esa era la única frase que se cruzaba por mi mente en esos momentos, al menos em hombre perfecto para mi, el era todo, el era el chico, el era mi mundo, el era mi todo. A pesar de todo lo que hemos pasado seguia siendo él.

-Bueno, digamos que simplemente tuviste suerte -Ríe Adam y lo miras con los ojos entrecerrados- Era una broma y no me agradezcas, no te preocupes, creo que era lo que ella necesitaba, necesitaba saber que estamos aquí para ella -me dijo dandome un tierno beso en los labios.- No se si debería preguntar, pero se puede saber ¿que sucedió?.- Hubo un silencio incomodo no sabía si debía decir lo que ocurrió.

-Me engaño -dijo Kim entrando a la habitación, obviamente había escuchado la pregunta desde el pasillo. Me sorprendió que fuera tan directa pero al mismo tiempo pude ver que cuando lo dijo su alma se partía en pedazos.

Adam abrazó a Kim y se quedaron así por unos minutos, Kim aún sollozaba pero cada vez se calmaba más, no quería hablar del tema asique no la presionamos, pero Adam con uno que otro chiste le sacaba una sonrisa.

Luego Kim simplemente decidió irse, se despidió pero se veía desganada estaba preocupada por ella pero por suerte me llamó de el telefono de la casa de sus padres y me asegure que habían llegado sin ningún problema, por más que quisiera estar con ella se que ella necesitaba estar sola para procesar todo y ella quería estar sola de otra forma no se hubiese ido.

Me quede con Adam,mis abuelos habían llegado pero me saludaron nisiquiera notaron la presencia de Adam y estaban cansados asique fueron directamente a la cama.

-Amor ¿te quedas conmigo?-pregunte a Adam esperando que aceptara.

-Si, de hecho lo hubiera hecho sin que preguntaras.- Claro que lo hubiese hecho le encanta hacer cosas sin que se las pregunten.

-Te amo-

-Yo igual-respondio

En ese momento nos besabamos muy tiernamente, sabía que Adam se iría por lo que aprovecharía su presencia lo más que pudiera.

Si decido seguir ( Si decido quedarme)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora