Capitulo 8

5 1 0
                                    

Foto Martín

Maite

Luego de haber almorzado voy a mi casa y me acuesto a mirar series en Netflix.

Se me pasan las horas mirando mi serie the walking dead.

De repente siento un portazo y salto del susto tirando mi laptop.

Miro hacia la puerta y veo a mi hermano tirado en el piso riéndose.

-Maldito, creí que eras un zombie- mi hermano empieza a reírse mas fuerte y yo no puedo aguantar mas y me rió con el.

Después de 5 minutos de reírnos como unos deformes, me dice que ya son las 10 que me empiece a aprontar para la fiesta de Nicolas.

Sinceramente se me fue la noción de la hora.

Empiezo a bañarme medio rapidito. Me seco el pelo para que no me quede como una esponja.

Por mas de que mi pelo es lacio en la noche se rebela.

Okey ahora que mierda me voy a poner. Miro los vestidos que mi madre me había comprado, no tengo de otra que ponerme alguno de esos.

Encuentro una pollera de tiro alta dorada y me pongo un top negro, en los pies me pongo unos tacones aguja rojos.

Me maquillo con una sombra negra y labios rojos, me miro en el espejo y la verdad es que me gusta lo que veo.

Agarro las llaves de mi auto y salgo a buscar a mi brother.

-Adaaaam- grito como una desquiciada.

Amo hacer eso.

-hermana que paso- dice mi hermano que viene corriendo con una cara de susto.

-Vayámonos que son las 11-

-Okey yo manejo hermanita-

-No manejaras tu, manejare yo a mi bebe- este chico que se piensa.

-Hermana que tu no vas a beber?-

-mmm, buen punto hermano-

Vamos al garaje y mi hermano se pone celoso de mi auto pero luego se le pasa cuando le digo que un día se lo presto.

Nos subimos a su ferrari y en 5 minutos paramos en una mansión gigante, deben de haber unas mil personas en esa casa, la música esta tan alta que parece que los vidrios de la casa van a explotar.

Nos bajamos del auto y empezamos a caminar por un camino de piedra para llegar a la puerta principal.

Un chico muy mono se me acerca. -Hola bonita, quieres venir conmigo y enloquecernos en una cama juntos-

-Sal de aquí asqueroso- trato de empujarlo y me agarra la cintura con fuerza.

Mi hermano al percatarse de la situación lo golpea- déjala en paz o te matare la próxima vez que siquiera le hables-

-Oh Adam lo siento, no sabia que era tu gata- el chico mira a mi hermano y huye.

-Hermana que sea la ultima vez que te vistes así, porque me voy a volver loco defendiéndote de todos los que se te acercan.

-yo no tengo la culpa-

Entramos a la casa y siento muchas miradas lascivas de muchos chicos y miradas de odio de parte de las chicas. Pensaran que salgo con mi hermano o que mierda?

Mi hermano de pronto se detiene y abraza a alguien que no logro ver bien.

Cuando mi hermano se mueve logro distinguir a la persona.

Nicolas

-Puedes cuidar a mi hermana unos segundos voy a buscar unos tragos- dice mi hermano alejándose y dejando me sola con el mujeriego de su amigo.

-Hola morocha- dice el morocho con esa vos tan sensual que solo te dan ganas de comértelo enterito.

Por dios me tengo que controlar.

-Hola- digo de lo mas cortada, no es de mala es que se como son todos estos tipos, se la tiran de galanes pera tener sexo con vos y después te dejan como un perro tirada.

-¿paso algo morocha que tienes ese humor?, si quieres yo te lo puedo cambiar en segundos- me dice mirándome de arriba a abajo.

-Escúchame bien maldito mujeriego yo no soy como todas las putas que vos te tiras, te piensas que diciéndome dos palabras me voy a tirar arriba tuyo?, estas quedando mal de la cabeza si piensas eso-

El me mira sorprendido, de seguro no se lo venia venir. Lo mas probable es que nadie en su vida lo haya rechazado nunca.

Antes de que me dijera algo llega mi hermano con un vaso de nose de que y me lo tomo todo.

-hey hermana mas despacio que te vas a arruinar- dice mi hermano.

-Lo tengo todo bajo control- digo alejándome de mi hermano y el pervertido de su amigo.

Comienzo a buscar la cocina por todos lados, esto es un maldito laberinto.

Veo una barra con un barman, no puedo creer que contratara un barman para una fiesta de un lunes.

-hey tienes una cerveza- le digo al camarero que es un hombre bastante mayor con una cara muy tierna.

-toma la cerveza chiquilla, y cuídate-

-cuidarme de que?-

-Hay chicos que pueden ser muy atrevidos con chicas borrachas- me dice el hombre con una sonrisa muy tierna.

-Bueno entonces me quedo tomando acá y si alguno se me acerca tu lo quitas por mi- le digo con una sonrisa verdadera.

Comienzo a hablar de la vida con el veterano y a lo lejos veo una cabellera rubia y enseguida reconoci quien era.

Ese era Martín, la persona que me humillo delante de todo el instituto, la persona a la que le di mi primer beso. Estaba mas grande que hace tres años.

Estaba abrazado con una rubia besándola como si no hubiera mañana.

Me di vuelta ya que no podia ver mas esa escena, me producía asco.

-Josue servime lo mas fuerte que tengas- Josue el barman me miro con desconfianza, pero al ver mi cara se dio cuenta que lo necesitaba.

Me sirvio un liquido azul obscuro, -¿que es esto?-

-Es abcenta, lo mas fuerte que hay- sin dudarlo me lo tome de un sopetón.

-Josue si esto me pega fuerte, busca a mi hermano Adam Brontte y dile que se haga cargo de mi-

Josue asiente y seguimos hablando, poco a poco me voy mareando mas y mas, comienzo a ver a josue borroso.

-Josue voy al baño ya vuelvo-

Comienzo a caminar sin rumbo la casa es muy grande, entro a una sala de ajedres, a un escritorio, a un pasillo con mas puertas y no logro poder seguir conciente.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 29, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Como no odiarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora