Los muertos no cumplen años

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-¿Seung Hyun?

-¿Hmm?

-¿Estabas durmiendo?

-Sabes que no.

Ji Yong apartó su vista del techo y volteó a ver a Seung Hyun quien estaba acostado a su lado, y aunque estuviese oscuro, podía ver muy bien que estaba con los ojos cerrados y con intenciones de pronto quedarse dormido.

-Seung Hyun, cuéntame de tu vida.

-No recuerdo mucho.

-Dime lo que sepas. Mejor, yo te haré preguntas y tú me contestas ¿Sí?

-Está bien.

-Primero ¿De dónde vienes?

-Te dije que no lo recordaba ¿No te lo dije?

-No lo recuerdo – se quedó pensativo – Ah sí, creo que fue el primer día que nos conocimos. Pero dijiste que vivías en una pensión ¿Qué recuerdas de eso?

-Era un edificio pequeño, vivía mucha gente entre jóvenes y adultos, más los dueños. Todos eran amables aunque no nos dejaban salir.

-¿No los dejaban salir?

-Ehh no, quise decir que yo no salía porque no me gustaba.

-Ah, ya – frunció el ceño, confundido. Esa respuesta le pareció extraña y aún más cuando cambió lo que dijo pero quizás no era algo por lo cual tomar importancia – Otra pregunta ¿Cuándo es tu cumpleaños?

-Hmm, el cuatro de noviembre.

-Proxi... ¿El cuatro de noviembre? – se incorporó quedando sentado, Seung Hyun lo imitó - ¡Eso es mañana!...No ¡Ya es de mañana! Eso quiere decir que hoy es tu cumpleaños – se abalanzó al cuello del castaño para abrazarlo – ¡Feliz cumpleaños!

-¿Cumpleaños? – se separó de Ji Yong y bajó la mirada – Ya eso no existe para mí. Morí, no puedo cumplir años.

-Pe-Pero ya reviviste ¿No? Dijiste que yo logré que tu corazón volviera a latir.

-Sí pero aunque me sienta vivo no quiere decir que lo esté.

¿Cómo hacerle entender? Ji Yong pensó que se le olvidaría todo lo de estar muerto pero aún lo seguía creyendo. Al parecer a Seung Hyun le había afectado escuchar la palabra "cumpleaños" pues se encontraba cabizbajo. Según él no podía tener otro de nuevo y eso lo hizo sentir triste. El pelirrojo lo tomó de la mano haciendo que el otro levantara la cabeza y le regaló una cálida sonrisa.

-Hoy es tu cumpleaños y no porque en realidad lo es si no porque hoy volviste a nacer – posó su mano sobre el pecho del castaño – Tu corazón late de nuevo y es porque estás vivo – se acercó más al otro, tomó su rostro entre sus manos y le dio un breve beso en los labios – Feliz cumpleaños Seung Hyun.

-Gracias – sonrió y le devolvió el beso junto unos cuantos más que repartió por toda su cara. Lo abrazó y lo tumbó sobre la colcha sin parar de besarlo lo que le producía risas a Ji Yong. Se detuvo y apoyó su cabeza en el pecho del otro – Te quiero, me haces sentir muy feliz.

-Tú también Seung Hyun – acarició su castaño cabello y dejó un beso en su cabeza – Tú también.

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¿Veintisiete? ¿Veintiocho? ¿Veintinueve? Seung Hyun ni podía recordar cuantos años tenía ya, era una de las cosas que se había borrado después de morir. A pesar de que tener un cumpleaños no lo convencía, haría lo que le dijo Ji Yong, hacerse la idea que había nacido de nuevo ese mismo día aunque no fuera posible y también dejaría que el pelirrojo le cocinara sopa de algas como estaba haciendo esa mañana después de despertar. El castaño esperaba sentado en el suelo detrás de la mesa en cuanto el otro llegó con el plato humeante y un vaso de jugo de manzana. En seguida se puso a cantar la canción del feliz cumpleaños.

Living with the deadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora