Capitulo 10
Louis despertó después de unas horas. Lo habían tenido que operar para asegurarse que la costilla rota no tocara los órganos del chico.
Zayn había decidido pasar la noche en el hospital junto con él, así podría cuidarlo y mantener avisados a los managers y sus compañeros de banda sobre la condición de Louis.
–Él está bien. Podrá pasar la noche tranquilo, ya le hemos inyectado medicamentos para bajar el dolor por la operación. –mencionó un doctor hacia Zayn. Le estaban dando las últimas revisiones al mayor.
–De acuerdo, doctor. –Lo acompañó hasta la puerta de la habitación–. Muchas gracias. –el hombre asintió y se retiró de la habitación. Zayn dejó salir un gran suspiro antes de mirar de nuevo a Louis, sabía que seguramente él le pediría explicaciones.
–Zayn… –Lo llamó débilmente desde la cama–. Zayn, ¿Qué pasó?
El moreno lo miró y trató de entonar una sonrisa. –Nada, Lou. Solo tuviste un accidente, pero ya estás poniéndote mejor.
–¿Dónde está Harry? –Parecía que su salud le importaba una mierda. El esos momentos él solo podía pensar en su pequeño–. ¿Por qué no está aquí conmigo? –trató de levantarse de la cama, sin embargo un dolor demasiado fuerte sobre la costilla le impidió si quiera moverse un poco.
–Hey, tranquilo. –Caminó hasta la cama y lo ayudó a recostarse de nuevo en una posición cómoda–. ¿No lo recuerdas? –Louis negó con la cabeza–. Te caíste mientras discutías con Harry, de las escaleras del estudio.
Louis se mantuvo en silencio por unos momentos, mientras intentaba recordar lo que habia pasado horas antes. –Tienes razón, lo recuerdo. –pronto su mirada se volvió preocupada–. ¿Y él? ¿¡Cómo está!?
Zayn lo miró algo confundido. –él está bien, el que cayó fuiste tú. Harry está sano y salvo. –tomó asiento en el sillón junto a la cama y se recostó levemente–. Pero creo que está destrozado.
–¿Por qué? –preguntó rápidamente–. ¿Qué tiene? Mierda, dime que está bien conmigo. –Louis solo podía pensar en Harry, en nadie más que en Harry. Quería verlo ahí, junto a él.
–Es solo que me preocupa. –confesó siendo totalmente sincero–. Me preocupa demasiado la forma en la que él sufre por ti.
Louis bajó la mirada, Zayn tenía razón, pero él también sufría por culpa del rizado, él no era totalmente el malo de la historia. –Tú sabes que Harry tiene una nueva pareja. Yo creo que está bien.
–No. No lo está y tú lo sabes muy bien. Y me da mucha rabia la manera en la que ustedes dos están jodiendo algo que cosecharon durante años. –Hablaba como si estuviera molesto.
–Yo… –habló muy bajo y balbuceando–. Yo no puedo quererlo de la manera en la que él me quiere.
–¿A qué le tienes miedo? ¿A lo que diga la prensa? ¡Por dios Louis!
–No. Me tengo miedo a mí mismo. A mis sentimientos. Pero tú no lo entiendes porque para ti es muy fácil decirlo, no eres tú el que está enamorado de una persona de su mismo sexo… –se giró lentamente sobre la cama dándole la espalda al moreno. Hablar de eso con alguien que no fuera Liam le intimidaba demasiado.
–Tienes razón. No lo entiendo, pero no necesito ser inteligente para darme cuenta que LO ESTÁS MATANDO CON TUS DESPRECIOS. –Elevó demasiado el tono de voz y pronto se dio cuenta que no era el lugar ni el momento indicado para esa discusión. Louis aun estaba demasiado débil y lo que menos tenía que hacer era alterarlo–. Lo siento… –bajó la mirada–. Perdón Lou, pero me enfurece demasiado está situación. Porque ustedes dos son mis amigos y esto me duele…
–No tiene por qué afectarte a ti. Es cosa entre él y yo.
–No, en realidad si me afecta. Porque los quiero. Además de todo, Simon está demasiado molesto, y Liam me ha dicho que le prohibió a Harry verte…. Lo estas jodiendo, viejo, y lo estas jodiendo a lo grande.
Louis lo comprendió. Al ser cobarde no solo se lastimaba a sí mismo, sino también que lastimaba a sus compañeros, pero sobre todo, lastimaba a Harry, que era la única persona importante en su mundo. Él era el enfermo, no Harry. Él era el maldito maricón, no Harry. Él era el jodido por amor, no Harry.
–Lo siento. –mencionó sin atreverse a mirarle–. Tienes razón. Soy un maldito cobarde y estoy arruinando a la persona que más amo en la tierra.
–No… No me pidas perdón a mí. Pídeselo a Harry.
-------------------------------------------
Una semana después.
–¿Entonces ya está bien? –Preguntó a Liam que se encontraba junto con los demás chicos en el hospital donde tenían internado al mayor.
Los días habían pasado como una eternidad para el rizado. Realmente había tenido que cumplir la promesa que le hizo a Simon y mantenerse alejado del hospital.
Todas esas noches solo había rogado por verlo. Quería abrazarlo y disculparse con él sobre el accidente. En realidad, quería disculparse con él sobre todo lo que había pasado.
–Sí, Harry, él ya está bien, esta tarde podrá salir, lo llevaremos a mi apartamento, para evitar así que esté solo en su casa. –Harry sintió demasiada emoción al escuchar eso. Por fin sentía que su pesadilla estaba terminando.
–Mmm, si, supongo que está bien que lo veas ahora que él ya está mejor. Estaremos en mi casa durante la tarde. –Liam no sonaba muy confundido, pero no le negaría la oportunidad de hablar con Louis, no sería justo porque era consciente de lo mucho que Harry había anhelado ese momento.
–De acuerdo, ahí nos vemos. Hasta entonces Liam. –colgó la llamada y miró los mensajes en su móvil. Tenía algunos cuantos de Bryan, pues ellos dos seguían viéndose constantemente como amigos.
Harry había encontrado en Bryan la compañía que le hacía falta por Louis.
Uno de aquellos mensajes decía: “Ya voy para tu casa, ¿De acuerdo?”
Harry lo pensó por algunos segundos. Aún era temprano. “De acuerdo, te espero. Xx”
ESTÁS LEYENDO
Say it LOUD. (Larry Stylinson) EDITANDO
أدب المراهقينHistoria de Larry Stylinson adaptada a la realidad.