Capítulo 9: Él

623 44 17
                                    


Al día siguiente me levante y pase toda mañana con Isaac en tiempo pasa rápido con ese enano, vi la hora y me dispuse a irme no sin antes haberle dado un gran beso en la mejilla y un abrazo de oso, el me devolvió el gesto y me dijo suerte y si que la necesitare.

Al llegar todos estaban calentando, he hice lo mismo, entre ellos estaba Lee lo salude y me ignoro me paso de lado y se fue con Galilea. Una punzada sentí en mi pecho ¿por que me ignoraba?...

Nos separaron en binas o parejas mejor dicho y me quede sola para registrar el límite de la aldea, camine ignorando las instrucciones que nos daban y camine.

No me daba cuenta hacia dónde iba estaba sumida en mis pensamientos, hasta que oí el chasquido de una rama partiéndose, me detuve saque lentamente una daga un poco desgastada por el paso del tiempo.

Me acerqué a la zona y de pronto una pequeña lagartija saltó para acabar a mis pies. Resoplé enserio que estoy paranoica, levante a la lagartija y la pose sobre una roca con musgos, el pequeño animal me observaba curiosa.

-¿Y Ahora qué?-le pregunte-¿Vas a atacarme?- musité burlonamente.

Y sin previo aviso un chico salió de la nada y me golpeó. No pude observarlos bien, lo único de lo que estaba consiente era que me había derribado soltando la daga en el momento y que mi nariz estaba sangrando y para ser honestas no era la primera vez que pasaba esto.

"Qué suerte la tuya querida" hablo la voz de mi conciencia sarcásticamente.
"Ahora no metíche" conteste molesta.

Di la vuelta y lo vi parado a unos pasos de mí no podía ver su rostro por los rayos de sol que nublaban mi vista.

-¡Bastardo!- me abalancé y le di un golpe certero en el abdomen- No te enseñaron a que a una mujer no se le golpea, se te va a caer la mano.

Me levante y lo observe en el suelo retorciéndose del dolor, sentía un poco de lastima por él. Me aleje lo suficiente como para poder localizar mi daga la cual guarde y analice al chico: No tenía ninguna marca visible, tampoco parece tener la llamarada o algo así y definitivamente no es un Crank, pero es un idiota y uno de los grandes.

-¿Estás bien?- Tenía que saber por lo menos para poder dormir tranquila.

-No lo sé ¿alguna vez te ha golpeado una chica desquiciada y loca?-se levanto lentamente.

-Si- conteste desinteresadamente. Como diciendo que el cielo era azul.

-Al parecer eres difícil de impresionar-

-Me ha pasado un poco de todo en esta vida- Y no mentí, tener de familia: tíos, primos, padres, hermano y amigos que les faltaban neuronas no ayuda a tener ni ser la más cuerda o simple chica de la aldea.

El chico dejo de moverse, se levanto para luego verme y yo hice lo mismo que él. Dioses es...

"Es apuesto" hablo mi conciencia "hola bombón" mencionó pícara.

"Hazte un favor conciencia"

"¿Qué?"

"No te avergüences"suspiré

"¿Vergüenza? No querida, simplemente tengo el valor para decir lo que tú no puedes o no quieres" me reclamó " además, soy TÚ conciencia, estás hablando contigo mismas tontita" no hable "Jaque mate, contradice está querida" y empezó a reír cínicamente.

El chico me sonrió, trate de devolver el gesto pero lo único que salió fue una mueca. El chico no se me hacía conocido y sabía perfectamente que no era de por aquí. No sabía qué hacer en esta situación y se me ocurrió una pregunta.

-¿Quién eres?

-No lo sé- respondió frustrado consigo mismo.

"Eso no me lo esperaba " pensé.

-¿Cómo que no sabes quién eres? Eso es ilógico y absurdo

-Al parecer si eres fácil de impresionar- me sonrió juguetón ¿es enserio?

-¿Cómo te llamas?- estuvo pensativo un largo rato, miro al cielo, al suelo, a los lados como buscando la respuesta. ¿Tan difícil era?

Antes de que puerta responder mi pregunta, mi tío Minho salió detrás de los arbustos sorprendiéndonos en el acto, lo derribó poniéndolo de rodillas, un pequeño gemido de dolor salió de sus labios rosados y algo dentro de mí me pedía -no me corrijo- me exijo que lo ayudara. Reaccione, estaba a pocos pasos de él pero de la nada salió mi padre Thomas quien me impedía el paso, no me importó he intente ir con él.

-¡NO! ¡Déjenlo, no ha hecho nada!-le grite a mi tío con  desesperación al ver que lo habían golpeado un par de veces. Tío Minho amarró al chico como un animal, me vio y levantó al chico furioso.

-¡Tío por favor no hizo nada!- le grite.

-Si como no y yo nunca he golpeado a Thomas- respondió sarcásticamente- No lo creo, a menos que lo que tengas en la nariz sea tomate, te creeré.

"Diablos el golpe que me dio" pensé molesta conmigo misma, Minho miro al chico y lo golpeó en la cara partiéndole el labio inferior.

-¡NO! ¡No lo golpeen!- quería soltarme de los brazos de mi padre, era imposible.

-Cálmate Victoria- me susurró Thomas al oído. Respire profundo y mire a mi alrededor, todos mis conocidos me miraban raro y me topé con la mirada de Galilea y su grupo que reían disimuladamente y ella estaba sonriendo, a su ldo estaba Lee quien en su mirada se veía pena y vergüenza, Galilea se abrazó a su brazo susurrándole algo al oído y Lee solamente asintió y rodeo con sus brazos su cintura.

Una punzada en el corazón fue lo único que sentí.

Los vi y ella me sonrió con una mirada de triunfo y maldad. Lee no me veía evitaba mí mirada.

El grupo que los rodeaba empezó a susurrar cosas entre ellos y algunos la apuntaban con un dedo acusadora mente. Firme mi sentencia de muere. El nuevo chisme se expandiría como pólvora, y otra vez sería el centro de atención " La chica incomprendida defiende a forastero que la golpeó y no sólo eso, si no que rompió la primera regla de la aldea entre otras". Maldije a Galilea y su grupo de idiotas, incluyendo a Lee.

-Llévenlo al cuarto oscuro- hablo Minho, nadie movió ni un músculo-¿Qué? ¿esperan una invitación?- se miraron entre sí indecisos-¡Muévanse! ¡No tengo todo él garlopo día!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 18, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Maze Runner: Descendientes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora