Capítulo 6: Que te vaya bien, zorra.

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Me aparto el pelo de la cara y lo meto entre la bufanda y mi cuello antes de entrar al bar. He quedado con Jackson en vernos en uno de los pocos locales del pueblo que no dan arcadas al entrar, y solo me ha dado tiempo a ducharme y cambiarme de ropa.

Me he puesto unos pantalones vaqueros rojos, unas botas negras hasta la pantorrilla, una camiseta roja del armario de mi hermana y mi habitual cazadora de cuero. Observo mi reflejo en la ventanilla de un coche y, dios, hasta se me ve guapa.

Entro en el bar para evitar obsesionarme con la idea de ser guapa. Admito que con maquillaje sí soy atractiva, pero yo odio el maquillaje. Desde detrás de la barra, Ron, el dueño, me saluda con una sonrisa. El y su mujer son amigos de mis padres desde hace años, y me suelen tratar bien. Me siento en la mesa más apartada del resto que encuentro, porque necesitaré intimidad para hablar con Jackson. Por teléfono parecía muy preocupado y triste, y cuando le he preguntado me ha contestado que me lo diría en persona.

-¿Qué le sirvo?-la voz me saca de mis pensamientos y me hace volver a la realidad.

Una chica, con un uniforme negro de camarera, está de pie a mi lado. Sostiene una libretita con una mano y un bolígrafo con la otra, y me sonríe tímidamente.

¿Desde cuando tiene Ron camareras?

-Uhm, una cerveza-le sonrío. Ella apunta algo en la libretita y me mira de nuevo-. Oye, sabes que era broma, ¿no?

No hace falta ser superdotada para saber que la chica está muy nerviosa. Y algo me dice que es por mi comentario.

-Yo... -se le resbala la libreta de la mano y cae al suelo con un repiqueteo metálico. -Lo siento.

Se agacha apresuradamente para recoger la libreta del suelo y le tiemblan las piernas.

Si que está nerviosa, si.

-Oye, tranquila. Relájate-le digo.

-Lo siento-repite-. Es mi primer día y...

-¡Natalie!-la voz ronca y de alto tono de Ron es inconfundible.

El hombre, calvo como una bola de billar y con una barba demasiado densa, aparece al lado de la chica y le rodea los hombros.

-¡Veo que ya conoces a Bridgit!-exclama.

-Ron, baja la voz, ¿quieres?-le pido.

-Está bien, está bien-su voz sigue siendo demasiado fuerte-. Mira, Bridgit, esta es la chica de la que deberías hacerte amiga.

-¿Desde cuando tienes camareras, Ron?-le pregunto mientras analizo la sonrisa que la chica me dedica.

No es especialmente guapa. Es delgada y de pelo castaño. Sus ojos son grises, pero carecen del brillo que tienen los de Blake. Pero su sonrisa es realmente preciosa; estoy segura de que podría conseguir lo que quisiera con una sonrisa así.

-Es una excepción-me contesta el hombre-. Es mi sobrina, ha venido desde virginia y ha querido ayudarme con el bar.

-Ah-no se que más contestar.

-¿Puedes ayudarla a adaptarse al pueblo y al instituto?-me pide Ron. -Le vendrá muy bien.

-Si, claro. Encantada.

-¡Estupendo!-hago una mueca por el dolor de mis tímpanos. Ron se vuelve hacia su sobrina. -Siéntate con Natalie, ya puedo yo con el resto.

-Espera, ¿ahora?-le digo. -Creía que te referías en otro momento.

-Si molesto, yo... -empieza Bridgit, pero una voz la interrumpe.

-¡Chica! ¡Ven con nosotros!

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⏰ Última actualización: Nov 09, 2015 ⏰

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