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Capítulo 15

Era una mañana hermosa para todos excepto para Levy.

Sabía que estaba enamorada de Gajeel pero le estaba empezando a gustar su admirador secreto.

La aguantaba aunque estuviera en sus "Días", era divertido pero a la vez cursi y eso a ella le encantaba.

Esa actitud le parecía familiar, familiar a la De Gajeel, aunque el era frío y distante cuando estaba con ella era divertido y cursi aunque lo ocultara.

No sabía lo que le estaba pasando, para ella era muy desesperante no saber que sientes por alguien, le pasaba frecuentemente, y aunque tuviera compañía con quien hablar eso y, si la tenía no quería.

'Lucy...' pensó.

Pero rápidamente borró ese pensamiento, ella pasaba por un momento fuerte y ella no podía ayudarla.

No sabe lo que siente perder a un familiar como a una madre, probablemente no aguantaría y rompería en llanto pero sabía que siempre tendría a alguien con quien hablar.

'Lucy'

Dejó de lado todo lo que tenía que ver con Gajeel y sus sentimientos para pensar en como ayudar a su mejor amiga.

- No es el momento para pensar en eso, Lucy necesita de tu ayuda. - Se dijo en la entrada de la escuela.

Faltaban unos 10 minutos para tocar la campana.

Armó valor y se encaminó al salón esperando que su amiga hubiera llegado.

Al abrir la puerta toda esperanza se esfumó.

Lucy no había llegado, ya había faltado una semana a la escuela, Ella no era así... No hasta que su Madre murió.

Con la cabeza gacha se dirigió a su asiento.

- Buenos días, Enana. - Le saludó su mejor amigo, Gajeel.

- .... - Le miró triste. - Buenos días.

- Piensas ir hoy a verla, ¿no? - Le dedicó una sonrisa a la pequeña chica para animarla.

- No lo había pensado. - Levantó su mirada. - ¡Buena idea, Gajeel!

- "Menos mal, regreso a ser la de antes" - Pensó el Chico lleno de piercings.

- Tu irás conmigo, Ah, Y Natsu - Sonrió - De seguro Lucy se alegrará.

- ¡Natsu! - Se dirigió al chico pelirosa que también se encontraba deprimido.

Al instante el pelirosa volteó y se encontró con una pequeña chica de pelo azul.

- ¡Vamos a alegrar a Lucy! - Le dijo - ¿Vienes?

Al instante al chico se le formó una sonrisa.

-¡Si! - Saltó de su asiento.

- Después de clases ¿Okey?.

-Okey- afirmó

×|×|×|×

-¡Luuuucyyyy! - Llamó a la puerta. - ¡Abre, Soy Levy!.

No se escucho nada.

- Ah, Ya sé - Dijo la chica. - Siganme.

- ¿A donde vamos, Enana?.

- Sólo sigueme. - Fue a la parte trasera de la casa y gritó. - ¡Por aquí!

Los chicos se dirigieron a donde estaba Levy y vieron la puerta al sótano.

Levy la abrió de una fuerte patada y entró.

-Vamos.

- Si. - Dijeron los chicos.

Cruzaron cosas viejas por encima de cosas viejas que tenía Lucy, en una de esas Levy encontró una foto donde salían su madre y ella abrazándose.

- Se veía tan feliz.- Murmuró guardando la foto.

- ¡Levy, Gajeel! - Llamó el pelirosa. - Aquí hay unas escaleras.

La casa de Lucy es inmensa, pero solo vive ella sola. Es muy solitario.

Subiendo las escaleras ven una puerta, la abren y se encuentran con un pasillo de color beige.

Siguen derecho hasta llegar a una puerta rosa con el nombre sobre ella de Lucy.

Al encontrarla Natsu va a abrirla pero se detiene, en eso Levy se le adelanta y la abre.

-¡Lucy!

Lucy se encontraba en un rincón con ojeras profundas y los ojos rojos, estaba despeinada y el brillo de sus ojos ya no estaba.

Levy corrió a abrazarla y consolarla en eso se acerca Natsu.

- Lucy... - Al pelirosa le rompía el corazón verla así, no aguantó y se lanzó sobre ella y la abrazo fuertemente. - ¡Lucy, Lucy, Lucy!.

Levy se separó de ellos y se dirigió a Gajeel que observaba el momento.

- Será mejor que nos vayamos, Gajeel. - Le dijo con una sonrisa.

-Tienes razón, estará bien con él. - Dijo saliendo del cuarto.

Al salir del cuarto, Levy cierra la puerta y se recuesta en ella.

- Gracias, Gajeel.

- ¿Eh?, ¿Enana?

- Gracias por todo, Gajeel. - Se lanzó sobre el para abrazarlo.

- Enana... - Se decía confundido.

- Shhh, dejalo así.