Capitulo cuatro.

932 99 11
                                    

Los días para la "no pareja" se hacían cada vez más cortos, los controles con el médico a cargo del caso de SungGyu les hacía saber cada vez más noticias positivas, cosa que ponía de buen humor a ambos chicos.  

WooHyun se encargaba de llamar cada día a los padres de SungGyu donde los más jóvenes les contaban todo lo que hacían en el día. 

En algún momento, SungGyu les contó acerca de su "no relación" con WooHyun y los señores Kim en primeras instancias estaban muy sorprendidos pero con un poco de dialogo, los felicitaron.  

-WooHyun-ah...-Le llamó SungGyu, sintiendo como el menor le acomodaba sobre la cama, ya era hora de dormir y al día siguiente debían ir a uno de los últimos controles del mayor. 

-¿Qué pasa, hyung? -Preguntó el nombrado mientras acariciaba la suave cabellera de su "no pareja".  

-Estoy nervioso...mis ojos duelen, ¿Y si me dicen que no me dejarán quitar la venda? ¿Y si no puedo ver? ¿Y si no puedo verte...? -WooHyun frunció los labios y luego se alejó del cuerpo del mayor en silencio para ir a su habitación.

   SungGyu quedó confundido y trató de buscar a WooHyun a tientas, pero cuando notó que se encontraba solo en la habitación, creyendo que el menor lo había abandonado como todos los demás, tuvo unas terribles ganas de llorar. Realmente le gustaba WooHyun y se podría decir que se estaba enamorando.

  Pero eso era muy pronto, ¿o no?   De repente sintió como el otro extremo de su cama se hundía y se asustó hasta que sintió los ya tan conocidos labios de WooHyun sobre los suyos.  

-Estoy contigo, hyung...hoy dormiré contigo para que dejes de tener miedo, ¿Si? -La dulce voz del menor hizo que el llanto contenido de SungGyu fuese liberado al final. - SungGyu...  

-Creí que me dejarías...eso me asustó más que dejar de ver. -Confesó entre sollozos  el mayor mientras se aferraba al torso del contrario, ambos se quedaron en silencio y abrazados por un largo tiempo hasta que WooHyun soltó una pequeña risa. - ¿De qué te ríes?  

-De lo tierno que eres, hyung...por eso me gustas cada vez más, aunque me trates como tu saco de boxeo algunas veces. -Ambos soltaron una pequeña risa y WooHyun se volvió a levantar para quitar la húmeda venda de la cabeza del mayor.  

-¿Debes cambiarla? -Preguntó el mayor, sentándose  correctamente en la cama mientras WooHyun comenzaba esterilizar una nueva venda.  

-Así es...además, no me gustó verte llorar y ver como tu venda se mojaba frente a tus ojos lo detesté...-Susurró el menor mientras comenzaba a poner el nuevo vendaje, terminando rápidamente.  

SungGyu tomó la muñeca de WooHyun e hizo que este se acercara, el menor entendió el mensaje del pelirrojo y comenzó un beso que creía iba a ser como los otros, tiernos y cortos. Pero al contrario de lo que creyó, el beso se tornó ruidoso, excitante y le encantó. 

Los brazos del mayor rodearon el cuello del pelinegro mientras que abría sus labios, invitando a le lengua del menor entrar en su cavidad, cosa que no bastó mucho tiempo para que pasara.   WooHyun estaba complemente cegado por la nueva faceta de SungGyu, si las cosas seguían así, iba a tener su primera experiencia sexual con un hombre justo ahora.  

-WooHyun...-Susurró el pelirrojo mientras se separaba con la respiración ligeramente agitada. -Quiero...quiero que seas mi novio, oficialmente.  

-Yo creí que ya lo éramos. -Susurró el menor mientras que correspondía a la hermosa sonrisa que SungGyu le estaba dando, aunque este aún no lo notase. - Entonces...como ya somos novios oficiales...no me podrás evitar que siga.

Ciego de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora