Cap VIII "La noche del bondage"

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Mini maratón, parte 2/2

Jay Park no tardo en llegar a la esquina que daba a la casa de Yonjie, sigo con mi maquillaje corrido por las lágrimas previas, no por nada ODIO A ZICO, corrí al auto de Jay Park, no trae su auto de siempre, trae un Jeep en color cromado, debe ser para que no lo reconozcan, sólo quería verlo, abrazarlo, besarle, sentir su calor.

Me puse mi chaqueta en la cabeza para que nadie me reconociera y abrí rápidamente la puerta del auto, al subir y colocarme cinturón, él arrancó rápidamente para que nadie nos vea, agitada y sin pensar lo besé en la mejilla, él esbozó una sonrisa, repito el mismo acto:

___: te vio alguien?

Jay Park: --negando-- no

Inhalé el aroma del auto y sentí olor a perfume de chica, era un perfume con aroma maduro, tal vez le gusta tirarse a las más maduras:

___: y este auto? de... de quién es?

Pregunté curiosa y un poco celosa, él miraba atento la calle:

___: de mi madre

Dice sin expresión mientras veo brillar sus negros ojos por las luces de la calle, aún no salimos a la carretera, me impresioné un poco pues igual es raro:

___: es de tu mamá? y tu auto?

Jay Park: está en la casa de mi mamá, intercambiamos auto para que yo pudiera ir por tí --hace una pausa-- pasaremos por mi auto ahora

Muerdo mi labio inferior nerviosa, conoceré a su madre? estoy incomoda porque realmente la diferencia de edad se nota entre nosotros:

____: conoceré a tu mamá?

Jay Park: --suspira-- puede ser, quizás salió con sus amigas o tal vez está dormida

___: y por qué no la llamas?

Jay Park: porque ya llegamos a su casa

Y así era, estabamos fuera de la casa de la mamá de Jay Park, era una casa parecida a la mía, ni tan pequeña ni tan grande, una casa normal, no sabía que la madre de Jay Park vivía por aquí, él estaciona en la entrada y quita las llaves del contacto.

Se acerca a mi persona y me desabrocha el cinturón, mi corazón se acelera al tenerlo tan cerca, siento su aroma, me toma la mejilla y me da un corto beso en los labios, mi corazón se dispara y mis mejillas se tornan rosadas, nos tocamos los labios hace un par de horas pero aún así extrañaba esa suavidad tan propia de sus labios, él sonríe y baja del auto, veo por fuera que está tocando el timbre de la casa pero no sale nadie, me percaté de que sacó su móvil y está marcando algo, creo que llama a su madre.

De un momento repentino siento mucho sueño pues no he podido dormir bien estos días, doy un gran bostezo y se me cristalizan los ojos, empiezo a sentir mi cuerpo pesado, ya no puedo más, mi subconsciente me está ganando y mucho, me acomodo para dormir en el asiento, cierro mis ojos y voy cayendo en profundo sueño.

Alguien me esta besando las mejillas y se sienten tan bien esos labios aterciopelados en mi piel, esos labios sólo son de alguien especial, aún con mis ojos cerrados esbozo una pequeña sonrisa mientras me comienzo a mover para despertar, gruño:

___: hemos llegado?

Me sale una voz quejumbrosa, voz de sueño, sigo moviéndome y me fijé que tenía una chamarra sobre puesta, una que huele al cautivador perfume de Jay Park, siento que unas manos se meten por mi cintura desnuda pero no con un propósito sexual, esas manos van directo a hacerme cosquillas en las costillas, mis carcajadas no tardan en salir:

Pero que chico más raro (Jay Park y tú) [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora