10 Veces [Yaoi-Gay]

Capítulo 3

×Dia 3-4×

Capitulo 3:

—Bueno, chicos—El profesor de rojizo cabello se dirigida a todos sus alumnos mientras acomodaba sus lentes—Los exámenes se hacercan y necesito que estudien lo mas que puedan—El típico sonido que indicaba que las clases habían finalizado se hacia presente—Eso es todo, Pueden retirarse.

El salón se comenzó a quedar vacío, la mayoría de los alumnos se dispersaban luego de atravesar la puerta. Los únicos que quedaron en el salón fueron el profesor y un estudiante.

—P-profesor... ¿M-me necesitaba?—Un tímido chico tartamudeaba nerviosamente acercándose a su profesor quien ordenaba sus libros dentro de su bolso.

—Claro, Sr... ¿Luis?—Dijo el anteriormente nombrando mirando de pies a cabeza a aquel pequeño y tímido chico, este asintió—Tus calificaciones... Están empeorando, si sigues así repetirás el grado.

El chico solo lo mirto finamente con los ojos cristalizados, a punto de llorar.

—¿N-no hay alguna forma de subir mis calificaciones?—El chico estaba literalmente arrodillado pidiéndole una solución.

—Si, Hay una forma—Dijo el profesor dándole una mano pasta que pudiese levantarse y este acepto la ayuda—Pero a ti no te la recomendaría.

—Por favor!—Grito el chico tímido, mientras el profesor caminaba hasta la salida, este se detuvo y se volteo—Are todo lo que quiera!

El profesor se haceco a el y lo beso, haciendo que este retrosediera sorprendido.

—¿Puedes superar eso?—El profesor reía por la expresión en la casta de su alumno.

El chico intentaba no parecer asustado ante tal acción de su profesor hasta que se digno a responderle:

—Superarte todo lo que piense hacer conmigo—Dijo Luis colocando una cara de valiente.

—Perfecto—El profesor sonrió de medio lado y Colocó una cara de malicioso—Esperarme cruzando la calle, te recogerte luego de haber terminado las clases.

×3 horas luego ×

La noche se había presente con un viento muy helado haciendo que Luis temblara por el frío, haciéndole pensar que su profesor ya lo había olvidado, en medio de sus pensamientos este chico estornuda, por lo que lo convence de volver a su casa y estar abrigado rodeado de sus felinos amigos frente a una agradable fogata. Comenzó a caminar cuando siento que una persona gritaba su nombre ¡su profesor estaba allí! No daños si volver a donde su profesor o seguir su rombo a si casa, decidió la primera opción.

El viaje en auto no fue muy corto ni muy largo, pero Luis estaba tan distraído que ni recordó que estaba en camino a la gran cada de su profesor, había escuchado de ella por algunas chicas de su escuela y era completamente igual a como la imaginaba: De grandes ventanales, de dos pisos, de una seguramente sofisticada madera, etc. Era grande, muy muy grande, como para vivir con una familia... Luis estaba tan hundido en sus pensamientos que no sintió cuando el conductor había bajado del vehículo para luego caminar hasta la entrada principal de su gran palacio.

—vive... ¿Con su familia? —Preguntó algo curioso, corriendo hacia el para que lo escuchara mas atentamente.

—Vivía con mi esposa y mi hijo pero hace unos meses nos separamos, ella creia que tengo una adiccion por las prostitutas... Pero no importa—El profesor le sonrió—¿Vamos?

Ambos entraron en aquel gigantesco palacio, Luis quedó impresionado por su interior, lleno de libros, pinturas, etc. Ambos estuvieron en el salón de aquella mansión. Pero no por mucho tiempo.

El profesor de Luis no paraba de mirarlo mientras le explicaba sobre lo que debía estudiar, por otro lado, su alumno estaba tan concentrando en sus tareas que no se percató de la mirada de su profesor la cual cargaba maliciosos planes los cuales usaría contra su querido alumno.

—¿Eso es todo?—Pregunto Luis cerrando su cuaderno y guardando todo dentro de su bolso.

—Falta una cosa mas—El profesor de Luis lo empujo para que así este cayera de espaldas al suelo y el colocarse arriba de el, haciendo que escapar le fuera imposible.

El profesor comenzo a besar el cuello de su alumno dejando un rastro de ellos hasta llegar a los primeros botones de su camisa. Comenzó a desnudar a su alumno lentamente, besando cada centímetro de su torso. Luego volvió a su boca la cual besaba salvajemente, mordiéndolo, haciendo que el menor intentara empujarlo para sacarlo de encima y poder escapar, pero era imposible. El profesor dejo a su alumno haciendo en ropa interior, sabia que se divertiría con su prisionero. Comenzó a tocar el miembro de el contrario por encima de la tela que lo cubría haciendo que este soltara leves gemidos, para luego dejar por completamente desnudo a su alumno y poder juguetear libremente con el. Lo masturbaba, haciendo que sus gemidos ahora fuesen mas fuertes, pero lo que venia era peor. El mayor lamia dos de sus dedos y volteo a su compañero para luego introducir bruscamente en Luis, este gimió de dolor. El menor pensaba que sus gritos alertaría a los vecinos de su profesor, pero en el recorrido a la mansión, no vio ningun otro "palacio" cerca de la mansión en la cual ahora estaba. Luego de unos minutos, el mayor decidió despojarse levemente de sus ropas y entrar en su alumno, este gemia el nombre de su profesor sin parar, el dolor que le provocaban el profesor a su alumno aun no se convertía en placer, al menos para Luís.

Estuvieron un buen rato Con las mismas acciones hasta que ambos lograron disfrutar hasta que El alumno se corrió junto a su profesor, pero este lo hizo dentro de Luís.

El alumno ya no estaba lleno de miedo como hace unos minutos atrás, envés de miedo sentía amor hacia su Querido profesor, ambos ser besaron tiernamente antes de quedar completamente dormidos.

×A la mañana siguiente×

Luís despertó antes que su profesor, por lo que decidió recorrer el gigantesco palacio en el que este vivía, Pero antes se colocó la camiseta de si profesor y su propia ropa interior ¡y así decidió comenzar su viaje de exploración! Aun que para lograr movilizarse debía guiarse de la pared para no caer al suelo. ¡Encontró bragas y sujetadores por montones! Es como si vivieran muchísimas mujeres en aquel palacio, pero... Su profesor había tenido sexo con el hace unas horas ¿No? Pues su hubiese sido así... ¡¿Por que el lugar se encontraba lleno de ropa interior femenina?!

Sentia unos pasos que se escuchaban aun cada ves más cercanos.

—¿Que estas haciendo?—El profesor ser acercó a Luís para luego tomarlo del mentón y besarlo.

—Simplemente estaba investigando—Respondió Luís luego de que el profesor de separara de su alumno.

—Que extraño—Dijo el profesor pensativo, Luís quedó confundido—Recuerdo que tu reprobaste en la investigación de física.

—Ha, ha—Dijo Luís sarcástico.

El profesor miro su celular para poder estar al tanto de la hora y ser sorprendió pues debía haber estado en la escuela hace unas pocas horas.

—Debemos ir a la escuela—El profesor tomaba de la mano a Luís—No Queremos que piensen que te viole—Rio mostrando unos perfectos dientes.

El profesor trato de mover a Luís al ya haberlo tomado de la muñeca, pero este cayó al suelo directamente haciendo que el profesor estallara en carcajadas.

—¡No te burles!—Decía Luís aún en el suelo, fallando en todas los intentos de lograr levantarse—No es mi culpa que un profesor más halla penetrado tan violenta y bruscamente, ¡Además sin lubricante!

—No te preocupes—Decía el profesor tomando a Luís en brazos—La próxima vez tendremos lubricantes y juguetes.

—¡Maldito Pervertido!—Luís se movía en los brazos hasta que logró datarse de su agarre y tocar la tierra, pero había olvidado por que si profesor lo tenía en brazos.

—Al parecer no piedras asistir a la escuela—Dijo el profesor colocándose a la altura de Luís y besándolo en la mejilla—Agradece que yo estaré contigo Cuidándote todos estos días.

—¡No! Alejate de mi—gritaba Luís desconsoladamente.

Y así fue como ambos pasaron una larga semana.

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