Smiley es un perrito que nació sin ojos,fue encontrado en una venta callejera de perros. A pesar del infortunio, este perrito nunca dejo de sonreír y su historia es muy motivadora!
Joanne es una adiestradora de perros, y cuando y cuando descubrió a Smiley noto que no tenia ojos. Rápidamente lo adopto y le hizo una cirugía para que sus párpados permanezcan cerrados y así evitar que el perrito se lastime. Quienes lo visitan dicen que a pesar de que Smiley se tropieza con un sinnúmeros de obstáculos, el nunca deja de sonreír, puede que no tenga ojos pero su sentido del olfato y el oído están súper desarrollados. Smiley y joanne son el uno para el otro, fue todo un reto educar a su perro pero de todos los obstáculos resulto esta hermosa amistad. Definitivamente este perrito nos enseña que a pesar de nuestros problemas nunca debemos rendirnos y sobre todo nunca dejar de sonreír!
PD: que les pareció?