Capitulo 30-El niñero

205 10 0
                                    

  Noté que a lo lejos estaba una mujer embarazada junto con Caitlin, serian amigas a juzgar por el amistoso abrazo que se dieron. La chica tenía su cabellera en una coleta, una castaña y larga. Sonreí inconscientemente; amaría ver a _____ en ese estado. Sería como un sueño. Corrí hacia donde se encontraba Caitlin
—Hola—salude a Caitlin quien pareciera que se helo instantáneamente— Cait...
—Mario—me abrazo y me alejo un par de metros— ve a mi casa; ya llego
—Sí, es que quería...
—Que vayas a casa—ordenó. Estaba sumamente extraña. La otra chica no conseguía moverse. Me acerque un poco
—Hola—trate de que me hablase pero solo camino velozmente a otro lugar. Esto me confundía. ¿Me ocultaban algo? Vi un auto llegar y con su conductor Diego. Demonios, llegue tarde. La chica quien no me hablo toco la ventana de Beadles y se metió en el auto. La vi. El auto arranco a toda velocidad— ¿_..._____? ¡_______!—exclame corriendo hacia el auto. Corrí y corrí, pero mis fuerzas se debilitaron, ella huía de mí. Me tire, más bien caí en el suelo. Caitlin llego minutos después en mi consuelo— Tu lo sabías—la acuse cuando estuvo junto a mi; con un tono leve de voz gracias al cansancio provocado
—No—exclamo— apenas llego hace una hora de donde se encontraba—se defendió— Nunca supe donde estuvo hasta el día de hoy
—¿Y Diego? ¿A dónde la llevo?—grite más que cuestionar
—No lo sé, supongo que _____ vio que era su única alternativa. ¡No lo sé!—exclamo
—Mierda, tengo que buscarla. Dame el número de Diego
—No. Creo que por ahora es mejor que no la busques—se cruzo de brazos
—Por favor—suplique— La eh buscado siete meses y ahora que regreso...—un momento— ella está embarazada—susurré esto último— ¿Cómo?—cuestione
—Mario, no soy la indicada...
—Tú debes de saber, ______ era estéril... ¿Cómo es que está embarazada? ¿Fue un plan para que ella formara una familia con su amante?
—¡No! Ella nunca ah tenido ningún "amante"—hizo las comillas con sus dedos— Mario eres muy ingenuo y manipulable. Te daré el nuevo número de ______, pero si te pido que no la presiones—saco su celular y me dicto el teléfono— Mario, trata de tener tacto; ella no está en condiciones de cualquier tipo de alteración
—Pero dime algo... ¿Cómo es que está embarazada?
—Yo diría que es un "milagro"—sonrió a lo que yo correspondí. Llegue a mi auto y marque el número. 1, 2, 3... No contestaron. Espere a estar más relajado en casa y conseguí otro teléfono que ella desconociera.

Narra ______

Llegue a mi nueva casa, el camino fue largo ya que Diego no quería una explicación, si no muchas. Se enojo al principio pero después entendió. Dijo que a pesar de que el padre de mi hija fuera un idiota, él la amaba. Decía que sería como su sobrina y yo me sentía más orgullosa que antes. En cuanto a Mario... no me lo esperaba. Caitlin no me dijo que él llegaría, lo que si me dijo es que me anduvo buscando por tierra, por aire y por mar. Iba cada semana a pedir información sobre mí y me comentó que dejo su empleo. Nunca pensé ser tan importante para él, nunca pensé que él aunque sea me estimase. Me creí un estorbo, pero al parecer no fue así.
No me imagino la impresión que le ah de haber dado el verme y más aun que me encontraba en este estado.
El persiguió el auto y si no hubiera tenido una considerable fuerza de voluntad hubiera bajado de él.
Mi teléfono timbro, conteste. De seguro era Caitlin pidiendo una explicación
—¿Hola? Caitlin. Disculpa por irme así, pero aun no tenía el valor de verlo. De seguro quiere explicaciones y ahora no quiero dárselas. Aun no quiero que sepa quién es el padre del bebé que estoy esperando...—hubo un silencio— ¿Caitlin?—no se escuchaba nada por la otra línea más que una pesada respiración— Oh no—dije imaginándome quien estaba detrás de la línea
—¿Quién es el padre, _____?—pregunto su voz. Oh Dios, su voz pronunciando mi nombre; era todo un verso. Un escalofrió recorrió mi cuerpo. Sin duda, lo amaba—______
—No, yo no... ¿Mario?—dije haciéndome la tonta
—Si soy yo—dijo sin pensarlo
— ¿Cómo conseguiste mi numero?
—Caitlin me lo dio. _______, necesito verte
—No se—suspiré— Yo también necesito hacerlo
—¿Nos vemos en mi casa o en... la tuya?
—Preferiría ir a la tuya
—Está bien, ¿Ahora?
—Por supuesto
—Y... _____—me detuvo
—¿Hmm?
—Te necesito—suspiro y colgó
Bien, no fueron más que unas cuantas palabras. Un par... pero ya me tenia de nuevo. "Te necesito"—Mario, si supieras que yo te necesito más... y no solo yo. Tu bebita, tu hija— Iba bajando las escaleras lentamente y me tope de frente con Charlie, se notaba más que solo extraño y malhumorado
— ¿Charlie? ¿Te encuentras bien?—dije algo preocupada tocando su frente, él retiro bruscamente mi mano
— ¿A dónde vas?—pude notar su tono frío e indiferente
—Con... Yo... mira es que necesito aclarar las cosas con Mario y sé que esto le hace daño—explique nerviosa, su mirada no ayudaba en eso—No quiero que sufra por mi—trague saliva— Iré a verlo—su rostro se torno en uno rojo de furia. Apretó sus puños de rabia
—No lo harás —soltó y yo contuve la respiración... ¿Cuál era el problema con eso?
— ¿Por qué?—dije acercándome cautelosamente a la puerta. Por primera vez, desconfié de él
—______—dijo ronco, esa voz la conocía. No era Charlie, bueno si pero... no el Charlie que yo conocía— Ya que quieres echar todo lo que me costó años planear y llevar a cabo; a la basura—Gruño — Tengo que confesarte algo—apretó más sus puños. Yo tome el pomo de la puerta por la espalda y justo cuando la iba a abrir y salir huyendo del lugar; él la cerro de un portazo y me acorralo contra la pared. Yo temblaba de miedo en ese instante, él no era Charlie. Él era un completo desconocido
— ¿A... A que te refieres?—dije titubeando
—Tu esposo te engaña. Ahora mismo está en su oficina tirándose a las secretarias—ESA VOZ. Contuve nuevamente la respiración— ¿Alguna otra pista?—abrí mis ojos de par en par
—Tú...
—Yo. Charles Finker—sonrió mostrando sus dientes. Vivir con el enemigo, con el verdadero depredador. ¡Ayuda!  

"El Niñero"[2TEMPORADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora