3. metamorphmagus ❅ golden trio era

vi. tournoi des trois sorciers

seis
 “torneo de los tres magos”

Cuando volvían a cruzar el vestíbulo con el resto de los estudiantes de Hogwarts, de camino al Gran Comedor, Alex vio a Lee Jordan dando saltos en vertical para poder distinguir la nuca de Krum. Unas chicas de sexto revolvían en sus bolsillos mientras caminaban. Kass lo miraba asombrada, pero más que nada porque ella si le tenía admiración, no porque se encontrará estupidamente enamorada de él, como todas las demás. Se dirigieron a la mesa de Gryffindor. Los alumnos de  Beauxbatons se habían puesto en la mesa de Ravenclaw y observaban el Gran Comedor con expresión crítica, haciendo que Alex bufara molesta por su actitud. Tres de ellos se sujetaban aún bufandas o chales en torno a la cabeza.

—Son tan ridículos, ¡ni siquiera hace frío, por Merlín! —hizo una mueca la metamorfomaga.

—Ya veo porque te caen mal, miran todo como si fueran mejores —dijo Kass de manera inquisitiva juzgando a los de su antiguo colegio.

—¡¿Verdad que si?! Honestamente no los soporto, había unos buena onda, y bueno, lo toleraba, pero hay otros que...

—Están lindas las chicas —comentó Thomas mirandondolas embobado.

Kass rodó los ojos y le dio un zape, haciendo que Alex riera.

—Muchas son mitad veela, o cuarto, octavo, etcétera —se encogió de hombros restándole importancia—. No deberías fijarte mucho en ellas, la mayoría no vale la pena.

Viktor Krum y sus compañeros de Durmstrang se colocaron en la mesa de Slytherin. Alex vio que Malfoy y los gorilas parecían muy ufanos por este hecho. En el instante en que miró, Malfoy se inclinaba un poco para dirigirse a Krum. Giró y vio que Harry veía lo mismo, e hizo una seña de asco y el rió.

Los alumnos de Durmstrang se quitaban las pesadas pieles y miraban con expresión de interés el negro techo lleno de estrellas. Dos de ellos cogían los platos y las copas de oro y los examinaban, aparentemente muy impresionados. En el fondo, en la mesa de los profesores, Filch, el conserje, estaba añadiendo sillas. Como la ocasión lo merecía, llevaba puesto su frac viejo y enmohecido. Alex se sorprendió de verlo añadir cuatro sillas, dos a cada lado de Dumbledore.