Mi Primer y Unico Amor (*SIN EDITAR*)

Capítulo 11

Nathan me tiende su mano para ayudarme a levantarme, la miro extrañada sin hacer ningún intento de agarrarla.

- Vamos April, yo no muerdo ni tengo mal de rabia- me dice divertido y con su mano todavía extendida.

-¿quién me lo confirma? -por lo que se tienes fama de perro, pero no se lo digo, termino cogiendo su mano con algo de vacilación, tira de mi hacia arriba y ya estando parada retiro mi mano, ha dejado una sensación muy rara en ella, tanto que me da miedo darle importancia así que lo dejo pasar, levanto la mirada y lo veo mirar su mano algo extrañado, nota mi mirada y cambia radicalmente su expresión a la misma mirada divertida, característica de Nathan

-¿Vez? No fue tan malo - bromea mientras aparta la vista de mi cara para recorrer con ella mi cuerpo completamente, me estremezco (*¿que te pasa April? ¡Deja de comportarte así!*) me doy una cachetada mental y aclaro mi garganta, asiendo que vuelva a posar su mirada en mi cara.

-¿terminaste la inspección Nathan? - le pregunto tratando de esconder mi reacción.

-Si April, y déjame decirte que pasaste - me dice divertido

- no necesito que me apruebes - le digo y me giro para empezar a trotar otra vez, pero me agarra del brazo impidiendo mi intención, me giro a verlo y me mira de una forma indescifrable e intensa, apartó mi mirada un poco sonrojada por tal intensidad - déjame pasar Nathan.

- ¿por qué te sonrojas? ¿no veo a April Romero, la pequeña golpeadora como una chica tímida?  - me dice con curiosidad ignorando totalmente mi ultimo comentario

- pues sera porque obviamente no me conoces - le respondo rodando los ojos

- quisiera cambiar eso, ¿puedo trotar contigo? - trato de ver un rastro de broma en él, pero nada

- supongo - empiezo a trotar con el a mi lado. El tiempo pasa en silencio pero lo mas raro es que no es para nada incomodo, estoy tan desconcertada con su actitud. Luego de un rato paramos a recobrar el aliento y nos sentamos en una de las bancas que hay en el parque 

- estas en buena forma ¿vas al gym (gimnasio)?- me pregunta de repente 

- no, no me gusta, simplemente corro en las noches para mantenerme así y no tener que ir a ese lugar - le respondo

- ¿por qué no te gusta? - pregunta con interés

- bueno me siento incomoda, una vez fui pero no funciono, sentía que todos me observaban, creo que no es lo mío. - le digo encogiendome de hombros- en cambio tú, ¿has pasado tu vida en el gym?

- para nada, hago ejercicios en mi casa por las mañanas y en la noche salgo a correr. - responde simplemente, es raro pensé que era de los que van a presumir en frente de las chicas en el gym. - ¿siempre vienes a este lugar? 

- Siempre acabo en este lugar, me trae muchos recuerdos de mi infancia, - le digo mirando a mi alrededor - por cierto ¿que haces aquí justamente? 

- Bueno salí a correr y acabe aquí, lo bueno es que preste atención y se como volver a mi casa - lo miro sorprendida de que me haya dado la respuesta, pensé que me saldría con una de sus ocurrencias - ¿por qué esa cara de sorpresa?

- no creí que me responderías, pensé que me dirías una de tus idioteces - le respondo sincera

-¿que concepto tienes de mi April? - me pregunta interesado 

- Creo que eres uno de esos chicos engreídos, que les gusta presumir y hacer salir de sus casillas a las personas con sus pendejos comentarios, que les gusta hacerse del adonis ante las chicas, y que solo buscan aprovecharse de las ellas para luego romperles el corazón. - le respondo sin callarme nada de lo que pienso.

- guou que mal concepto tienes de mí - me dice sorprendido - ¿por qué me vez así? - me encojo de hombros - bueno, mi concepto de ti es: que eres una de esas chicas anti-sociales, que se centra excesivamente en sus estudios, agua fiestas, aburrida e hijita de papá - lo miro con la boca abierta casi llegando al suelo.

- Como se nota que no me conoces, yo para nada soy ese tipo de persona y mucho menos aburrida ni agua fiestas - el se encoje de hombros - te lo demostrare - miro a mi alrededor y veo a un par de ancianos caminando no muy lejos - ve hacia la otra punta del parque cerca de aquella pareja - me mira sin comprender - ¡ya! - se va desconcertado y queda cerca de los ancianos, me levanto y salgo corriendo hacia la pareja 

- Holaaaaa!!!!! - les llego gritando fingiendo emoción - Aww pero que linda pareja, ¡¡me encantan!!, ¿en qué año estamos? - me miran raro

-2015 querida - responde la ancianita 

- Siiiiiiiiiiiiiii!!!!!!!! - les grito saltando lo mas alto que puedo, los abrazo super fuerte- ¡La maquina funciono! ¡¡¡FUNCIONO!!! - los batuqueo un poco por los hombros, les doy besos en las mejillas y salgo corriendo, me volteo - ¡¡¡de verdad funciono!!! - y sigo corriendo hasta perderlos de vista al poco llega Nathan muriendo de la risa al igual que yo.

- tengo que reconocerlo, eso fue épico, los abuelitos te miraban como si fueras un extraterrestre - me dice después de calmarnos

- entonces ¿soy una aburrida? - le miro expectante

- no, eres una loca extrovertida, me gusta - paro de reír inmediatamente y me mira con intensidad directo a los ojos, aparto la mirada roja como un tomate

- Ehh bueno me tengo que ir, ya es tarde - le digo tratando de salir de esto 

- tienes razón, te acompaño - me dice

- no! Tranquilo no vivo muy lejos, adiós. - salgo corriendo antes de que pueda discutir

-¡April! - me giro sin dejar de correr - ¡are que cambies tu forma de verme! 

- ¡Lo veremos, recuerda que todavía no te salvas de mi venganza! - le grito, lo veo reír y no puedo evitar reír también, me volteo y sigo corriendo.

Corro a gran intensidad directo a mi casa, ya en el frente paro y recobro el aliento, entro lo mas silencioso que me es posible, voy hacia la cocina bebo un vaso de agua fría y me dirijo a mi habitación.

-¿donde estabas? - casi me caigo del susto, me agarro a la puerta y miro a Alec sentado en mi cama 

-¡Mierda Alec! Casi haces que me de un infarto - le reprocho poniendo mi mano cerca de mi corazón, que martillea a gran velocidad

- responde - Alec en sus momentos puede ser peor que mi padre 

- Estaba corriendo - le digo rodando los ojos ante su actitud

- ¿A esta hora? ¿sola? - miro el reloj de mi despertador, 1:30 am, oh si que tarde.

- si, ahora por favor quiero darme una ducha y acostarme, mañana hay clases. - lo empujo fuera de la cama pero no se mueve - puedes ser tan insoportable cuando te lo propones. Bien, si fui a correr yo Sola, siempre lo hago en las noches porque, como recordaras no soy muy madrugadora, mis papas nunca se dan cuenta de mi salida porque duermen como troncos pero, por si despiertan, dejo una nota diciendo que estoy haciendo. Y si dejaras de lado tu actitud sobre protectora la hubieses visto - le digo tomando la nota de mi tocador y ondeandola para que la vea.

- lo siento, pero no puedo dejar de preocuparme por ti, eres mi hermanita y tengo el trabajo de protegerte y ahuyentar a todos los idiotas que se te acerquen, y después de tantos años separados, me he puesto paranoico - me explica abrazandome y le correspondo - por cierto me tienes que contar algo

- cierto, pero sera mañana, estoy agotada y hecha un asco - le digo separándome

- siempre, Auch! - le doy un golpe en el brazo y se soba - descansa enana - besa mi frente y se dirige a la puerta

- igual adefesio - se ríe y me deja sola. Tomo una ducha un poco larga, me coloco el pijama y me tiro en la cama toda cansada. Antes de caer en un profundo sueño la imagen de Nathan se forma en mi mente, ¿que me esta pasando? ¿por qué pienso en el? ¿por qué no puedo sacar sus ojos de mi cabeza? ¿por qué tuve esas reacciones con el? ¿por qué me hago todas estas preguntas? Me dejo llevar por el sueño sin ser capaz de dar respuesta a todas estas preguntas que tanto miedo me dan.